El viernes se realizarán las elecciones en el Colegio de la Abogacía de Entre Ríos. Analía Coria, de la lista opositora, remarcó que buscan “recuperar la dignidad” de los colegas. “Las expectativas son excelentes”, aseguró. Nahuel Amore
Analía Coria encabeza de Lista Azul y Blanca que participará de las elecciones para renovar la Comisión Directiva central del Colegio de la Abogacía de Entre Ríos. Actualmente está al frente de la Seccional Paraná y busca ser una alternativa a la gestión oficial de Alejandro Canavesio, con quien buscan diferenciarse. En ese sentido, según remarcó, desde su espacio se pondrán “del lado del abogado que litiga” y no del que “favorece al Poder Judicial”.
“Nuestros ejes principales son todas las medidas y gestiones que tengan la mirada en el abogado que ejerce la profesión, el que litiga. Los procesos judiciales de prácticamente todos los fueros han tenido variaciones importantes a partir de la pandemia y de las normativas elaboradas por el Superior Tribunal de Justicia. Las mismas incorporan tecnología y merecen una regulación específica por parte de la legislatura, donde se distribuyan las responsabilidades entre el servicio de justicia y los abogados, de una manera más equitativa”, planteó, en un mano a mano con DOS FLORINES.
Desde esa perspectiva, además, consideró importante atender los honorarios de los profesionales para que tengan un correlato con las responsabilidades que asumen en su ejercicio. “La abogacía en este momento tiene en general un ingreso muy depreciado porque tenemos una Ley de Honorarios que no prevé todos los procesos y además cuyos valores se fijan en Tribunales”, justificó.
Regulaciones
Por otra parte, Coria hizo hincapié en las dificultades que debieron enfrentar los abogados durante el contexto de coronavirus y que, de cara al futuro, deberán regular. “Con los reglamentos de las presentaciones electrónicas se nos exige a los estudios tener escáneres para incorporar documentación por vía electrónica, en un sistema de mesa virtual que nos exige trabajar en horarios totalmente inhábiles”, cuestionó.
Sobre este aspecto, comparó: “En el esquema anterior de litigación llevábamos nuestros escritos entre las 7 y las 13. Ahora se nos da la facilidad de presentarlo de manera electrónica, pero a su vez nos requiere que estemos hasta altas horas de la noche aguardando resoluciones que te notifican en cualquier horario y día”.
Ante esta situación, subrayó que “esas medidas requieren pensarlas sistemáticamente y regularlas”. “Las responsabilidades de los abogados deben tener un correlato con los derechos, no sólo con los honorarios, sino también con tener presentados en término los escritos cuando los sistemas informáticos se caen, es decir, todas las dificultades que trae aparejada la litigación en forma electrónica con la que por supuesto estamos de acuerdo”, planteó.
Diferencias
Ante la coincidencia de temas a trabajar, DOS FLORINES consultó cuál será la concepción que los guiará para resolver estas demandas de los matriculados. Sobre ese punto, explicó: “La diferencia es sustancial, porque la propuesta de Canavesio es por escrito. El sistema de juicio que propone el Colegio de Abogados central en estos momentos es una manera de litigar que favorece al Poder Judicial y no favorece al abogado litigante. Por eso dije que la idea de la Lista Azul y Blanca es ponerse del lado del abogado que litiga”.
Asimismo, consideró que “para los noveles abogados que recién se insertan cuesta adquirir equipos de escáneres o tener internet en sus estudios. Eso ocurre porque hay una nueva manera de litigar. Y esa manera debe permitirle al abogado el cumplimiento de las garantías constitucionales, que el proceso sea debido, con garantías suficientes”.
Del mismo modo, dejó en claro su posición respecto del trabajo de los profesionales al expresar que “el abogado es una persona que se encuentra entre la sociedad y el servicio de Justicia, su rol es vincularlos. Sin embargo, terminamos siendo prácticamente empleados de un sistema. Esta es la dignidad que queremos recuperar”.
Expectativas
—¿Con qué expectativas llegan al viernes? ¿Están en condiciones de lograr el apoyo de sus colegas?
—Las expectativas son excelentes. Nosotros venimos de una elección larguísima, que se inició en febrero y estaba prevista para marzo, pero fuimos excluidos de la elección y debimos promover un amparo que el Superior Tribunal de Justicia admitió la participación amplia. Luego, en una segunda versión de elecciones, se debieron suspender porque los contagios de Covid se habían agudizado. Esta es la tercera vez que estamos yendo a las urnas.
En el ínterin de este tiempo hemos podido, en primer lugar, mostrarle a los colegas cuál es el compromiso de la Azul y Blanca de haber ido hasta un juicio de amparo, con la vocación de participar en un proceso justo y regular. En el medio hemos podido hacer conocer nuestra mirada y nuestras propuestas para los abogados y las abogadas. Hemos encontrado hasta ahora una gran recepción.
Lógicamente, hoy vivir de la profesión de abogado es un desafío interesante. Hemos encontrado a lo largo y a lo ancho de la provincia colegas de distintos fueros, de distintas edades, con distintas miradas y experiencias que se van sumando al proyecto cada día. De cara al viernes estamos realmente muy contentos.
