Integrar S.A. se suma al boom de los fondos de inversión
02/01/2018
En los últimos 15 meses se advierte en el mercado un fuerte crecimiento de estos instrumentos especializados que captan las inversiones financieras de los individuos y las corporaciones que buscan mejorar sus rendimientos financieros. La empresa presentó una alianza estratégica con INTL Gainvest S.A. con la cual atenderá operaciones de la región que elijan en un importante menú de operaciones con renta fija y variable. Guía básica para los pequeños ahorristas y las grandes compañías donde juega el horizonte de inversión, la cultura de riesgo de cada comitente y las expectativas de los fondos que rinden más que plazos fijos, Lebacs y los dólares en el colchón. Gustavo Sánchez Romero / sanchezromero@arnet.com.ar
El cambio en el escenario institucional del país, con la llegada del nuevo gobierno nacional, resucitó con fuerza un instrumento que supo tener alta preeminencia en las elecciones de los argentinos en otros tiempos y desde hace, al menos, 15 meses, se ha reposicionado captando los excedentes de muchos argentinos particulares y de las empresas que buscan profesionalizar sus inversiones. Actualmente existen unas 200 mil cuentas de comitentes en todo el país distribuidas en unas 15 administradoras y sus familias de productos –muchos de ellos gestionados por bancos públicos y privados-y los inversores se están volcando a ellos a la espera de que sus dineros tengan mejores rendimientos al ser manejados por profesionales de los mercados.
Integrar S.A. -compañía concebida para brindar servicios especializados de asesoramiento en operaciones bursátiles y que la Bolsa de Entre Ríos posee un 15 % de participación- ha visto este desplazamiento del mercado donde los inversores se están volcando a esta opción y decidieron formar una alianza con el reconocido fondo INTL Gainvest S.A., donde si bien pierden una relación directa con las decisiones del inversor, incrementa su portfolio de servicios y se prepara para ser el puente en el asesoramiento para llegar a estos instrumentos y los posiciona mejor en el mercado para captar flujos disponibles para estas operaciones y que, aseguran, seguirá creciendo.
El impulso inicial lo brindó el blanqueo de capitales del año anterior que tuvo en la Bolsa un incentivo importante, y la expectativa de algunos en la recuperación de los indicadores macroeconómicos fueron haciendo el resto; máxime cuando el dólar se mantiene relativamente estable y existen instrumentos que le ganan a los plazos fijos, e incluso a las lebac.
Pero todo esto dependerá de la naturaleza y personalidad de cada invesor, donde, obviamente, las ganancias suelen ser directamente proporcionales al riesgo tomado.
Por ello, los fondos de inversiones brindan un buen número de opciones que van desde los más conservadores con Lebac, Letes e instrumentos públicos de renta fija y a plazo como aquellos que exploran opciones más complejas como fideicomisos de infraestructura, acciones de compañías energéticas, Etc, de mercados internacionales.
Qué son.
Según su definición técnica, un fondo común de inversión es un patrimonio indiviso, que se constituye cuando un grupo de personas con similares objetivos de inversión aporta su dinero para que un profesional lo administre, invirtiendo en una cartera diversificada de activos
En los países desarrollados, los fondos son un instrumento de inversión muy usado, en continuo crecimiento. Actualmente, y según las estadísticas, en Estados Unidos representan uno de los sectores financieros más importantes en volumen de activos, seguidos por los bancos comerciales y las compañías de seguros. En la Argentina, los Fondos nacieron en 1961, regulados por la Ley 15885, que fue reemplazada por la Ley 24083 de Fondos Comunes de Inversión y la ley 26,831 de Mercado de Capitales.
En la región, Integrar S.A. ya había conseguido la autorización para funcionar como agente de distribución y colocación de fondos comunes de inversión, en una necesidad de “aggionarse” a los movimientos del mercado y ante el desplazamiento de los inversores hacia estos esquemas, con una realidad que ya tiene unas 200 mil cuentas de comitentes que otorgan su poder a los fondos para administrar su inversión, según describe a DOS FLORINES Alfredo Calabrese, el director ejecutivo de la Bolsa de Comercio de Entre Ríos y titular del nucleamiento Integrar S.A.
En general, existen dos categorías de fondos en la Argentina que están funcionando: las independientes y aquellas que están vinculadas a los bancos, donde sus ahorros son direccionados a partir del análisis de riesgo de cada inversor.
Según lo expresado desde Integrar S.A., en su alianza con INTL Gainvest S.A se comercializarán básicamente seis de las opciones que presentan estos fondos, básicamente la vinculada a renta fija, dólar y las opciones en pesos; es decir la de inversores que prefieren no arriesgar tanto y quiere posicionarse por encima de la inflación, cosa que ha venido sucediendo con los resultados de los fondos en los últimos meses.
“Nuestro objetivo está dado por aggionarnos porque estamos viendo que la industria de fondo crece abruptamente y tenemos que tenerlo como alternativa ya que muchas inversiones se van para ese lado y no la podemos captarlos. Nosotros vamos a trabajar con dos fondos en dólares, que invierten en activos de corto plazo y que está teniendo un rendimiento promedio del 3 % anual, y con algunos activos de más larga duración que rinden un 4,5 % promedio. Operamos un fondo que invierte en acciones, es decir con renta variable con performance positiva por arriba de la inflación. También se puede trabajar con los conocidos Money Market, algunos preferirán las Lebacs que están por arriba del 25 % de rendimiento, otros en renta fija de la Argentina con fideicomisos, cheques de pago diferidos y otros que rondan el 22 o 23 % de rendimiento”, explica Calabrese.
Riesgos y seguridades.
En rigor, el nombre técnico de estos instrumentos es el de Agente de Administración de Productos de Inversión Colectiva de Fondos Comunes de Inversión y funciona bajo lo que se llama “Reglamento de gestión”, y su funcionamiento está sujeto a la normativa de la Comisión Nacional de Valores. A los fondos se puede llegar con muy pocos miles de pesos, y generalmente estos suelen ser más conservadores; en tanto que el flujo de las empresas es la presa más preciada por los fondos, y donde también apunta la empresa de Bolsa de la región. Las leyes del mercado confirman la presunción que en tiempos en que las inversiones son rentables y los mercados crecen, estos fondos suelen ser una opción sensible; pero cuando el mercado se cae, empiezan a aparecer los problemas, y en los fondos aparece el efecto embudo o la “Puerta 13” (todos quieren salir al mismo tiempo por una pequeña puerta) y ante el pedido de rescate colectivo colapsa el fondo.
Según Calabrese, los fondos de inversión tiene liquidación inmediata, es decir que quien quiera salir puede hacerlo con rescate que no van desde un día (T+1) hasta rescate con liquidaciones que implican nomás de 72 horas (T+3).
“Existen dos segmentos esenciales: el pequeño y mediano inversión y por otro lado las empresas que muchas veces no tiene optimización de sus flujos financieros y busca profesionalizarlos”, explica el contador quien asegura que en algunos casos se da que esta optimización de la gestión financiera de la empresa permite lograr mejores rendimientos por el accionar financiero que por el productivo. Usualmente, los fondos comunes de inversión cobran en promedio un 1,5 % anual sobre el activo administrado. Por ahora, las ganancias para los más osados resulta muy superior a esto; y todo dependerá de dónde se decida colocar los ahorros. En el mundo funciona bien, pero esto no deja de ser la Argentina.
Cómo funcionan
Según la presentación realizada por INTL Gainvest S.A en Paraná, el mecanismo funciona con cierta facilidad. En este esquema, los clientes adquieren una participación en el Fondo para lo cual suscriben cuota-partes en función del monto de dinero invertido. Este dinero pasa a “incrementar el patrimonio” del Fondo y se utiliza para realizar las inversiones en los activos que constituyen el objeto del Fondo. La decisión del inversor de comprar cuotapartes de un FCI, debe materializarse a través de la integración y firma de una “Solicitud de Suscripción”. Además, contra entrega del dinero, también se entrega al cliente un “Recibo de Pago por Suscripción”. Una vez ejecutada dicha orden, la Sociedad Depositaria entregará al cliente la “Liquidación de Suscripción”, en la que consta la cantidad de cuotapartes suscriptas y el precio al que fue realizada la operación. Dado que la suscripción de cuotapartes se hace al precio de cierre del día y que este valor se determina con posterioridad a la finalización del horario bancario, la “Liquidación de Suscripción”, se entrega el día hábil siguiente a la presentación de la “Solicitud de Suscripción”.
Rescate.
Según el informe técnico, cuando el cuota-partista decida concluir, total o parcialmente, su participación en el Fondo, deberá firmar una “Solicitud de Rescate”, ordenando a la Sociedad Depositaria ejecutar la correspondiente operación. En la “Solicitud de Rescate” se hará referencia a la cantidad de cuota-partes o de dinero que se desea rescatar. Realizada la operación se practicará la liquidación, entregándose al cliente: la “Liquidación de Rescate” a través de un el crédito en la cuenta que designó ó de la entrega de un cheque y una copia del “Recibo de Cobro por Rescate”, cuyo original quedará en poder de la Sociedad Depositaria. En la “Liquidación de Rescate” constará, como mínimo, la cantidad de cuota-partes rescatadas, el precio de rescate y el importe correspondiente al rescate. También constarán las comisiones de rescate, si las hubiere.
El caso Hope Fund
Si bien en el mercado intenta mostrar la seguridad del sistema en momentos de bonanza, la difusión masiva de las maniobras del Hope Funds, que involucró acusaciones por estafa y que atrapó a inversores de todo el país, resulta ser una variante no deseada que aparece más que regularmente. Hope Funds había hecho su fortuna con una serie de “contratos de mutuo”, esquemas donde grandes y pequeños inversores aportaban dinero bajo la promesa de fabulosas tasas de hasta el 12 % anual. La mayoría de los clientes aseguran no haber visto un peso de vuelta, ni de interés o inversión inicial, en lo que sería un gigantesco esquema Ponzi similar al que llevó a la cárcel a Bernie Madoff, ex cabeza del Nasdaq.
Más de 30.000 millones de dólares administrados
Así como el blanqueo de capitales impulsado por el Gobierno en 2016 fue un éxito, la gran disponibilidad de dólares que generó en el mercado argentino congeló (relativamente) la cotización de la divisa y llevó a que los inversores busquen alternativas con bajo riesgo pero que mejoren su rendimiento. Para ello, uno de los instrumentos más consultados por el segmento minorista fue el de los Fondos Comunes de Inversión (FCI) en dólares. Según datos de la Cámara Argentina de Fondos Comunes de Inversión, el volumen operado exclusivamente en moneda norteamericana creció más del 400% en lo que va del año, para llegar a los casi USD 3.000 millones, un 10% del mercado total de FCI. “Ocurre que para aquellos que buscan un portafolio diversificado de instrumentos públicos y privados en dólares, los Fondos Comunes de Inversión representan una inversión atractiva, con el beneficio de poder contar con la disponibilidad del dinero en 72 horas”, señaló Nora Trotta, presidente de Megainver a medios especializados.