Lo dijo José Colombatto, presidente de la Rural gualeguaychense, al cuestionar la prohibición del uso de agroquímicos. Críticas a Piaggio, Bordet y Macri. Danilo Lima
Glifosato y retenciones fueron los ejes centrales de los discursos de los dirigentes rurales entrerrianos durante la inauguración de la 125ª Exposición de la Sociedad Rural de Gualeguaychú. El presidente Mauricio Macri, el gobernador Gustavo Bordet y, sobre todo, el intendente Martín Piaggio fueron los blancos de las críticas en la tribuna gualeguaychense.
El presidente de la entidad anfitriona, José Colombatto, cargó duro contra el jefe comunal por haber impulsado la prohibición del uso de agroquímicos en el ejido de la ciudad. “La prohibición del uso de fitosanitarios en casi 20 mil hectáreas es irracional, ya que prohíbe a un productor trabajar su campo, pero alambrado por medio, el vecino sí puede. Se ha prohibido de la noche a la mañana a nuestros productores trabajar la tierra bajo los sistemas que hoy imperan en la Argentina y en el mundo. Los productores locales han sido, lisa y llanamente, proscriptos”, se despachó el ruralista.
“Creo que no hace falta aclararlo, pero igual lo digo: desde la Rural apoyamos las buenas prácticas agrícolas y nunca defenderemos a los productores que hacen mal las cosas, porque somos fervientes guardianes del medioambiente. Y defendemos los productores, no al modelo productivo que los gobiernos pasados instalaron. Ese modelo extractivo no es idea de los productores, nosotros nos adaptamos, pero queremos reglas de juego claras e igualitarias”, indicó.
Lo que “más nos duele”, remarcó Colombatto, es que “no fuimos escuchados” por las autoridades municipales y hoy, subrayó, los productores “no pueden sembrar sus campos y desde la Municipalidad no ofrecen alternativas”. La puesta en marcha del PASSS (Programa Alimentario Sano, Seguro y Soberano) “puede ser interesante, está en sus albores, en una etapa experimental, por lo que hoy no es una solución a nada”, se quejó.
El ruralista gualeguaychense no se olvidó de criticar a Bordet. Le reprochó no haber generado “los consensos necesarios” y permitir que “por una disputa interna se cajoneara el proyecto de ley de fitosanitarios, dejando a la provincia de Entre Ríos sin una herramienta actualizada”.
También le reclamó al Gobernador “un sinceramiento” y que defina “si está del lado de los productores” porque, argumentó, “queda políticamente correcto decirlo ante la prensa, pero hay datos de la realidad que preocupan y duelen: no recibe a la Mesa de Enlace; Entre Ríos no participa de la Mesa Lechera y el Gobierno dejó la silla vacía hace ocho meses en el INTA entrerriano”.
Con la mira puesta en la Casa Rosada, Colombatto enfatizó que desde el sector agropecuario no avalan la vuelta de las retenciones: “Es un paso atrás”.
Poner el hombro.
Mientras, el presidente de la Federación de Asociaciones Rurales de Entre Ríos (Farer), Raúl Boc-hó, más moderado, valoró que el presidente Macri “haya puesto la cara” la semana pasada durante la Jornada Nacional del Agro, en Buenos Aires, y consideró que la aplicación temporal de las retenciones generó “un poco de tranquilidad” entre los productores.
El ruralista de Villaguay, asimismo, subrayó que el campo “pondrá nuevamente el hombro”, al tiempo que solicitó “un gesto” a los Poderes Legislativo y Judicial “con medidas ejemplares en todo lo que tiene que ver con la austeridad”.
Boc-hó, por último, volvió a quejarse por la falta de respuesta de Bordet a los pedidos de audiencia de la Mesa de Enlace.
Frustración.
El vicepresidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Jorge Chemes, por su parte, admitió que el campo “apoyó a este Gobierno (nacional)”, pero luego, con la vuelta de las retenciones, “todas las ilusiones que teníamos de poder salir adelante” se transformaron ahora “en una frustración”.
El nogoyaense alertó que si no se toman “medidas urgentes” para las economías regionales algunas de ellas “no sobrevivirán”.
Chemes, en otro orden, se mostró “orgulloso” de que ningún productor agropecuario “esté en los cuadernos” de la corrupción y recordó que hace 10 años mientras “nosotros protestábamos en las rutas” muchos empresarios “negociaban coimas con funcionarios”.
