Bordet empieza a bajar el telón
17/10/2021
Sin la efusividad de años anteriores y con la tranquilidad de quien alcanza su propósito, el gobernador les manifestó a los industriales -frente a Frigerio, Cresto, Stratta, Bahl y Bahillo- que dejará a quien lo preceda “una provincia ordenada desde el punto de vista fiscal y financiero, y también previsible”. Nahuel Amore
Gustavo Bordet brindó un discurso durante la Jornada de la Industria de Entre Ríos que, tras bambalinas, fue interpretado como uno de sus actos finales antes de reverenciar al público y bajar el telón. A poco más de dos años de cerrar su segundo y último mandato al frente de la Gobernación, se mostró más sereno que en otras oportunidades ante a ese particular auditorio y dejó entrever la tranquilidad del deber cumplido.
“Esta es una buena oportunidad para rendir cuestas a nuestros empresarios y productores que con sus impuestos sostienen las políticas y acciones de gobierno que llevamos adelante”, afirmó delante de los industriales. De inmediato, destacó el proyecto de Presupuesto 2022 por ser “la primera vez en muchísimos años que no va a necesitar endeudamiento para cubrir gastos corrientes; solamente se preverán los endeudamientos para insumos de capital y obra pública con organismos financieros internacionales”.
En esa línea, Bordet manifestó con orgullo que “hoy la provincia muestra números sólidos y muestra no sólo un equilibrio sino también un superávit financiero después de muchísimos años”. “Hoy tenemos una provincia ordenada y solvente”, remarcó, con tono y mirada apacible, ante un auditorio presencial que lo observaba en el Círculo Médico de Paraná y otros tantos que lo seguían en vivo por streaming.
No es para menos, ya que heredó de Sergio Urribarri una caja en rojo y con un endeudamiento creciente en términos de la relación con los ingresos corrientes. Incluso, llegó a la Casa Gris sin los recursos necesarios para afrontar la totalidad de los haberes y aguinaldos a fines de 2015 que lo obligaron a recurrir a un adelanto financiero por 300 millones de pesos de manos de Mauricio Macri.
En una provincia y ciudad con significativo peso del Estado, pagar los sueldos y salarios anuales complementarios en tiempo y forma es todo un mandato para quien se sienta en el Sillón de Urquiza. Aunque para el 99,9% de los hombres y mujeres que allí lo estaba escuchando la eficiencia es una regla básica y se necesita mucho más que eso para trascender, Bordet dio a entender que se trata de un hecho histórico y digno de transmitir -más aún cuando el desequilibrio fiscal es uno de los principales cuestionamientos hacia la administración central-.
Deuda
En ese sentido, el gobernador valoró sobremanera el proceso de reestructuración de deuda pública que debió afrontar luego de complicarse el pago del bono en dólares contraído en 2017. “Siempre tuvimos como norte honrar los compromisos y este ahorro es lo que nos permitió tener la base para lograr el ordenamiento fiscal y financiero de la provincia”, subrayó, además de acotar que esto le permitirá al futuro gobernador tener mayor previsibilidad.
“Para desmitificar algunos conceptos, quiero señalar que esta deuda es perfectamente previsible en el tiempo. De aquí a su vencimiento, nunca va a insumir más del 7% del total de sus gastos corrientes y va a estar en promedio del 3%. Cuando asumí en 2015 la deuda total dolarizada era de 1.020 millones de dólares y hoy es de 870 millones de dólares. Así, hemos logrado, luego de un pico en 2017 cuando contrajimos este bono, una reducción progresiva y paulatina de la deuda, que seguirá así para 2022, terminando con la última amortización en 2028”, explicó.
Acto seguido, como quien de a poco empieza a juntar sus cosas para despedirse, Bordet resaltó: “Esto lo digo porque dejaremos a quien nos preceda no solamente una provincia ordenada desde el punto de vista fiscal y financiero, sino también previsible para honrar el cumplimiento de la deuda”. Frente él, lo seguían atentamente Rogelio Frigerio, Enrique Cresto, Laura Stratta, Adán Bahl y Juan José Bahillo, algunos de los nombres en danza para sucederlo en 2023.
Sin más, el primer mandatario provincial terminó su discurso con un saludo y compromiso de trabajo articulado con el sector privado, especialmente los anfitriones, a quienes les prometió previamente que trabaja para “poder llegar a fin de año con la eliminación total de un impuesto que siempre entendimos distorsivo, que es el de la Ley 4.035 de aportes patronales, que sin lugar a dudas va a mejorar la estructura competitiva”.