Claudia Gallinger asumió la dirección en reemplazo de Oscar Pózzollo. Es profesional del INTA uruguayense y coordinadora del Módulo Avícola. Dos Florines
La doctora Claudia Isabel Gallinger asumió el cargo de directora de la Estación Experimental Agropecuaria (EEA) Concepción del Uruguay del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y, de esa forma, se convirtió en la primera mujer en conducir una unidad del organismo en Entre Ríos.
Gallinger dirigirá por cuatro años los destinos del INTA uruguayense que extiende su accionar en los departamentos Uruguay, Islas del Ibicuy, Gualeguaychú, Tala, Villaguay y San Salvador.
La ceremonia de asunción de Gallinger fue presidida por el director del Centro Regional Entre Ríos del INTA, Guillermo Vicente, quien explicó la metodología para la elección de directores mediante concursos públicos, al tiempo que agradeció a todos los concursantes y al director saliente, Oscar Pózzolo, por sus labores en equipo.
Héctor Arbiza, presidente del Consejo Local Asesor, y Edgardo Reggiardo, presidente de la Asociación Cooperadora, por su parte, destacaron las acciones del INTA en el sector y la importancia de una directora representante del ámbito avícola.
Gallinger, en su exposición, remarcó que expuso su trabajo al frente de la EEA Concepción del Uruguay se basará en valores y trabajo, siempre al servicio de la comunidad.
En el sitio institucional del INTA se destaca que Gallinger es Licenciada en Bromatología, egresada de la Universidad Nacional de Entre Ríos (UNER). Realizo su maestría en Zootécnica en la Universidad Federal Rio Grande do Sul, siendo su tema de tesis “Exigencias de colina y metionina en presencia de una sustancia donadora de grupos metilos en pollos parrilleros”. Su Doctorado en Ciencia, Tecnología y Gestión Alimentaria lo realizó en la Universidad Politécnica de Valencia, España, y su tema de tesis fue “Estabilidad oxidativa y calidad de carne de pollo enriquecida con ácidos grasos n-3 proveniente de fuentes de origen vegetal y animal, protegida con vitamina E y selenio orgánico”.
Desde 2012 coordina el Módulo de Aves del Proyecto Bienestar Animal y Calidad de Carne abordando la temática de calidad de producto de la cadena de carne aviar y huevo, se estudia el impacto de nuevas tecnología de crianza sobre la calidad de garras y se realizan estudios sobre diferentes estrategias en frigorífico para cumplimentar con las nuevas normas de bienestar animal.
En 2017, en una nota publicada en el Suplemento Agro de la agencia Télam –en la sección “Las caras del INTA”–, Gallinger señaló que estaba “predestinada a trabajar y vivir entre los pollos”. Es que su padre fue uno de los productores integrados que dieron origen a la avicultura moderna a mitad de los setenta.
Al Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria se acercó en 1988 para estrenar su Licenciatura en Bromatología colaborando con la bióloga Delia Suárez que, en la EEA Concepción del Uruguay, investigaba el almidón en el arroz, y al tiempo pasó a formar parte de uno de los primeros equipos del INTA especializados en avicultura.
