Una fábrica entrerriana se reinventa y convierte la cerveza en alcohol para donar a hospitales

Para no desperdiciar miles de litros de cerveza artesanal, Litoraleña puso en marcha un proyecto solidario. Dos Florines

Las fábricas de cerveza artesanal también atraviesan un momento difícil, por la caída del consumo en tiempos de coronavirus y la paralización productiva de las plantas. En ese contexto, en Entre Ríos hay ejemplos de emprendedores que decidieron reinventarse, en pos de aprovechar los excedentes que evidentemente no encuentran mercado y de generar un aporte solidario ante la falta de insumos básicos para la salud.

Tal es el caso de Litoraleña Cerveza Artesanal, que desde el departamento Colón destila miles de litros de alcohol para donarlos a los centros de salud y hospitales de la zona y ciudades cercanas. Mariano Chaulet, uno de los impulsores de este emprendimiento junto a Rauly Marsó, contó a DOS FLORINES en qué consiste el proceso de reconversión, que suma además el aporte de empresas y el municipio de San José.

La fábrica desde hace varios años ganó popularidad en la provincia y la región por su calidad y variedad de productos, pero se ve afectada por la imposibilidad de comercializar tanto en bares de la zona como así también en Rosario y Buenos Aires, principales destinos. Por ello, en colaboración con Albace, modificaron los equipos y pusieron en marcha el nuevo desafío de evitar los desperdicios, producir alcohol etílico y ayudar en momentos críticos de pandemia.

“Nosotros lo que estamos haciendo es aportar cervezas nuestras que no van a llegar en buen estado, entonces antes de tirarlas lo que hacemos es agregarle levaduras, azúcares y llevar una cerveza de 6% de alcohol a 8 o 9%, sin importar el sabor ni aroma. Si tenemos 1.000 litros a 6%, son 60 litros. Pero si tenemos 1.000 litros de una cerveza de 9% de alcohol, son 90 litros que uno tiene disueltos”, explicó.

De todos modos, reconocen que por el momento deben hacer frente sin ingresos al pago de los distintos costos, sobre todo de servicios. Uno de los más importantes es el uso de gas envasado y también de energía eléctrica.

Iniciativa

Según Chaulet, la iniciativa toma como modelo un caso en provincia de Buenos Aires, que los motiva a convertir su equipamiento en destiladores. “La idea surge a raíz de una iniciativa de Brew House, una cervecería de Mar del Plata que se encuentra con el problema de que van a tener que tirar cerveza, entonces antes de eso, deciden hablar con una destiladora que producía gin y comienzan con las primeras tandas de alcohol”, señaló.

Luego de este primer paso, continuaron con la vinculación con otros actores para dar forma al desafío. “Me comunico además con Fermentis, una empresa francesa de levaduras, vinos e industriales, y nos comunicamos con más personas. En base a eso, se armó un grupo de Whatsapp que se llama Destiladores Solidarios, donde estamos técnicos en levadura, técnicos destiladores con medalla de oro en whisky, que es la gente que nos asesora en destilación”, destacó.

Producción

Respecto de los cambios en los modos de producción, aseguró que “la diferencia entre producir alcohol y cerveza no es mucha: cualquier producción de alcohol, primero hay una fermentación de azúcares y en ese consumo el azúcar produce alcohol. Lo que se hace es destilar una cerveza”.

Sobre la capacidad, indicó que utilizan “una gran olla ocupada para hervor, de 2.700 litros”, a la cual también le dispusieron modificaciones para lograr transformar el vapor. “Ahí atrapamos todos esos vapores, los transportamos por una serpentina, los enfriamos y volvemos líquido. Ahí vamos obteniendo diferentes destilaciones, con diferentes grados alcohólicos”, explicó.

De esa manera, los emprendedores evitan los desperdicios y transforman el espíritu cervecero en una causa solidaria, en instancias complejas para los servicios de salud que requieren más que nunca de insumos básicos como el alcohol.

¿Quiénes colaboran?

El proyecto solidario cuenta con la colaboración Las Camelias SA, Cooperativa Arrocera Villa Elisa, Metalúrgica Albace, Nirobeer, la Municipalidad de San José, Rotary Colón, Supermercado 207, Panadería La Moderna, Trasnporte TLE, Transporte LBD y Capulines, entre otros colaboradores anónimos.