Soja: en el primer semestre, las importaciones se acercaron al récord anual
22/07/2023
Entre enero y junio se importaron 6,1 Mt, cerca del récord de 6,4 Mt anotado durante todo el año 2018. A pesar de ello, el procesamiento de soja es el más bajo desde 2008. La cosecha de maíz avanza por debajo del promedio del último lustro.
Por Belén Maldonado – Emilce Terré
La gran sequía de la campaña 2022/23 redujo la cosecha de soja un 52,6% interanual a 20,0 Mt, según los últimos datos de GEA. Como consecuencia, las importaciones de soja, que mostraban una tendencia decreciente desde el año 2018, muestran una fuerte suba y acumulan 6,1 Mt durante el primer semestre de 2023.
Sabiendo que Argentina es uno de los principales productores y exportadores de harina y aceite de soja, y que cuenta con una capacidad de procesamiento de aproximadamente 70 Mt, una cosecha de soja de apenas 20,0 Mt deja una gran capacidad ociosa y una fuerte necesidad de importar el grano, en un intento por sostener el nivel de actividad. En este sentido, durante el primer semestre de 2023 las importaciones acumuladas crecieron y se triplicaron en comparación con el mismo semestre de 2022, consolidandose como el más alto en importaciones de soja de la historia.
Como comparación, las 6,1 Mt importdas hasta junio inclusive se encuentran muy cerca ya del récord anual de compras al exterior, que data del año 2018 cuando ingresaron 6,4 Mt del exterior.
En cuanto al orígen de las importaciones argentinas de soja, se observa que durante el primer semestre de 2023 la mayor parte de las mismas provienen de Paraguay, como ha sido históricamente. No obstante, Brasil muestra un notable incremento como origen de las importaciones, ya que del 2% al 10% que representó entre 2016 y 2022, hoy su participación crece al 44% del total. Solamente en junio, Argentina importó 1,1 Mt de Brasil.
A pesar de la gran entrada de la soja desde el mercado externo, el crush acumulado de la oleaginosa en el primer semestre del año llega a tan solo 14,3 Mt y marca un mínimo de 15 años para igual período. Así, la molienda de soja se evidencia como la más baja desde 2008, lo que demuestra que la histórica sequía impactó de lleno en la principal industria exportadora del país.
La cosecha de maíz avanza por debajo del promedio
La cosecha de maíz avanza, pero se muestra por debajo del promedio de los últimos 5 años. Al 20 de julio, se llevaba cosechada el 75% de la producción de maíz de la campaña actual, 4 puntos porcentuales por debajo del promedio mencionado. La razón puede encontrarse en la gran proporción del maíz tardío sembrado durante esta campaña. A su vez, durante las últimas semanas se ha observado un avance lento de la cosecha como consecuencia de excesos de humedad temporarios por efecto de las precipitaciones registradas. Los productores aguardan a que descienda la humedad en el grano trillado para evitar descuentos por exceso de humedad en los acopios.
El aumento de importaciones de soja y el avance lento de la cosecha de maíz se insertan en un contexto de precios internacionales que se mostraron mayormente al alza durante la última semana.
En cuanto al maíz, un hecho de importancia que sucedió el lunes fue el retiro de Rusia del acuerdo de exportaciones ucranianas del Mar Negro. Dicho acuerdo, pactado en julio de 2022, permitía la navegación segura de barcos ucranianos a través del Mar Negro para la exportación de granos. De acuerdo a datos provenientes de las Naciones Unidas, más del 50% de las exportaciones ucranianas a través del Mar Negro son de maíz. Tras el retiro de Rusia, el país presidido por Putin bombardeó esta semana el puerto de Odesa en Ucrania generando daños en su infraestructura. Aunque el mercado ha reaccionado moderadamente ante el fin del acuerdo, lo cierto es que, de no avanzar hacia una solución, las preocupaciones y la incertidumbre podrían llevar a los precios hacia una mayor suba, considerando que Ucrania es un abastecedor clave del mercado mundial de granos y derivados.
Con respecto a la soja, los precios en Chicago durante la última semana se posicionaron mayormente al alza. El mercado internacional mostró preocupaciones en torno a una reducción de la producción en Estados Unidos, por temor de que los pronósticos de clima seco y cálido afecten los rendimientos en el país.