Gustavo Samojedem, CEO de Laboratorio Eriochem, analiza la relación entre la pandemia, los laboratorios y la economía. Con vasta experiencia en laboratorios globales realiza un interesante análisis donde tabica al escenario internacional a partir de cuatro bloques geopolíticos que “se asustaron” ante los efectos económicos y se generó “una inédita carrera industrial”. Los errores de la estrategia argentina. Por Gustavo Sánchez Romero / Especial para Revista Análisis
Aseguró que el laboratorio ruso Gamadeya era largamente prestigioso y su vacuna Sputnik V tendría una alta eficiencia cuando aún no se conocían los informes técnicos, era muy cuestionada en el país y la publicación The Lancet aún no había escrito nada acerca de su seguridad. Este farmacéutico con rigurosos estudios en biotecnología y gran experiencia en los principales laboratorios del mundo vive en Paraná.
Su vasta experiencia no parece coincidir con sus 55 años de vida; y su amplio conocimiento no se condice con su bajo perfil y humildad. Infiero que hay una relación entre la dinámica de las vacunas y la economía mundial. Su capacidad ayudará a encontrar la punta del ovillo que este cronista no logra asir.
Al final de la entrevista -que ocupó más de una hora- advertí que así sucedió. Con la primera frase sentí que el entrevistado había interpretado al entrevistador y fue todo más fácil.
Gustavo Samojedem es un rara avis que se siente cómodo en la paz pueblerina y como CEO (Chief executive officer) de Eriochem, se puede proyectar también en estos arrabales del fin de mundo, sin tiempos ni límites a su expresión profesional.
“A ver, así veo el tema yo”, me dijo como rompiendo el hielo en una entretenida clase magistral.
“Hace cinco años hubo pandemia de gripe aviar y a casi nadie le importó. Hay pandemia de ébola en África y tampoco al mundo parece importarle demasiado. Eso muestra que el problema no fue la pandemia de Sars Covid 2019. El problema fue su impacto económico. Entonces, cuando todos los gobiernos centrales y los grupos económicos más importantes del mundo se dan cuenta que esto iba a detener la economía de manera drástica con brutales efectos sobre los negocios globales. Se produce entonces una reacción inmediata en este sentido y se enfocan en lograr desarrollos tecnológicos acelerados para encontrar la forma de salir lo más rápido de este escenario actual”, prologa. Habla entonces de los cuatro bloques geopolíticos que dominan el mundo.
-¿El mundo no se asustó cuando apareció en Wuhan sino que fue la reacción económica lo que aceleró tanto la evolución científica?
-Sí. No hubo miedo mundial por la aparición del virus. El problema no fue el Covid, porque puedo nombrar varios Covid o virus anteriores a éste: Sida, Ébola, NH1NH, Gripe Aviar. Aquí hay sólo cuatro virus que pasaron igual y a nadie le importó.
-De hecho las estadísticas sobre los muertos anuales de uno y otro no parecen tener grandes diferencias.
-Sí. Serían los mismos que hubiesen fallecido por Influenza. En 2018 murieron 55 mil personas por gripe común. La Influenza es la gripe común por la que la gente se vacuna todos los años y sus distintas cepas. Esto va a ser igual que una vacuna de gripe. Es más, hay un desarrollo americano que se llama Novavax que están programando agregarle el Sars Covid. Dentro de dos años, cuando te vayas a dar la vacuna, ya tendrá incluida la del Covid.
-Volvamos a su tesis sobre los grupos económicos y la reacción mundial…
-Bien. Entonces los grupos económicos y políticos mundiales se prepararon para tener independencia con vacuna propia. Hubo cuatro grandes bloques políticos que pensaron esto. Estados Unidos, Europa, China y Rusia, que deciden poner sus mejores recursos científicos técnicos para desarrollar una plataforma de vacunas. Tomaron distintos caminos, pero verás que en octubre del año pasado estos grandes bloques tenían uno –en algunos casos dos o tres- desarrollos propios que llegaron a buenos resultados preclínicos y clínicos y están desplegados en el mundo cumpliendo la función que se propusieron.
Alianzas.
El ejecutivo nacido en Buenos Aires profundiza en su posición y en su devenir se disipan lentamente las nubes sobre la capacidad de entendimiento de este momento tan enrevesado.
Samojedem avanza describiendo con nombre y apellido la acción de estos cuatro grupos que decidieron desarrollar vacunas con sus recursos y plataformas tecnológicas. Los rusos pusieron a jugar al Instituto Gamaleya, que debe su nombre a quien fuera discípulo de Pasteur (Gamaleya Research Institute of Epidemiology and Microbiology); los chinos pusieron a los laboratorios Sinopharm y Cansino, los dos grandes grupos bioeconómicos que tiene Asia. Los americanos pusieron a Moderna y grupos de Massachussets y Pfizer, que es la número uno del mundo. Por su parte Europa pone a Oxford, que es la mejor universidad y la asocian con un laboratorio sueco-inglés como es Astrazeneca.
-Regrese al eje de la economía, si le parece…
-Bien. Cada uno trabaja y llegan todos a tener su propia vacuna. A fin del 2020, los cuatro grupos políticos económicos habían logrado su objetivo. Habían desarrollado diferentes vacunas que habían demostrado eficacia y seguridad en grupos de pacientes. Ahí empezó, con esto, el segundo tema. Todos dijeron: bárbaro, tenemos la tecnología, sabemos cómo hacerlo, y ahí empezó el desafío del escalamiento industrial más grande que haya visto la industria farmacéutica. Había que fabricar miles de millones.
En el mundo se producen entre 300 y 500 millones de vacunas contra la gripe; de pronto se necesitan 6000 millones para un año. Entonces ya la carrera no es la misma. Se trasladó del terreno científico tecnológico al terreno industrial. Una nueva carrera por el espacio, para ver quién llega primero a la luna.
-Comparativamente; ¿En qué condiciones parte cada bloque en esta carrera?
-En realidad parten muy parecidos todos, aunque hayan usado plataformas y metodologías distintas. ARN Mensajero los americanos, Vivas Atenuadas los chinos, etc. Las vacunas de ARN Mensajero son las más avanzadas en cuanto al desarrollo tecnológico, y se las llama de terapia génica. Se le introduce código genético al cuerpo humano, éste lo reconoce, lo reproduce y genera los antígenos. Esta es la tecnología más osada, con más riesgo. Los ingleses y rusos fueron a lo más seguro y usaron el mismo método: de vector viral. Ahí lo que se hace es tomar un virus, que no es infectante y lo hacés parecer al Sars Covid 19. Ellos usan un virus que se llama Adeno Virus. Los rusos (vacuna Sputnik V) usan Adeno Virus humano, para el componente uno, y otro para el componente dos. Los de Oxford usaron un Adeno Virus de Chimpancé, por eso la vacuna inicialmente se llamó Chadox, que significa Chimpancé Adeno Virus Oxford. Alguien se dio cuenta que el nombre podía generar alguna reacción negativa en los pacientes que iban a creer que con la vacuna iban a treparse a los árboles y comer bananas, y entonces lo cambiaron (Risas). Los chinos usaron lo más tradicional, lo que se usaba para el polio de Sabin.
-¿Cuáles son los pasos básicos que impone la industria?
-Bien volvamos. Esa carrera de industria tecnológica también es una carrera de suministros. Pasa que si bien yo digo que hay distintas plataformas la carrera industrial es la misma.
El principal problema que se desató en esta carrera para llegar a tener la vacuna, primero para inocular su población y si le sobra para el resto, se dieron en los insumos. Especialmente en los viales de vidrio, y con los tapones. En un mercado mundial donde se consumían cada año 600 millones de vacunas se pasa a necesitar 6000 millones.
Tecnológicamente todos los laboratorios de los cuatro bloques han demostrado efectividad y eficacia. Y en una vacuna que tenga 69 % y otra 87 % de eficiencia no te dice nada en forma individual, porque en realidad la vacunación funciona cuando funciona la vacunación poblacional. Si no vacuno el 70 % de la población, es lo mismo que le ponga a uno una de 60 u 80 % de efectividad. El concepto de la vacunación es cortar la transmisión viral.
Vicisitudes.
Lo que plantea el profesional es que el mercado no pudo reaccionar a tiempo a la explosión de la demanda industrial, y fue allí donde el cocodrilo se durmió y fue billetera. “El bloque que más rápido agarró se aseguró la vacuna, y el resto que espere a que la industria se adecue a la nueva demanda. Estados Unidos compró toda la producción de viales que pudo, todos los tapones que pudo –que no son pocos- y los chinos y europeos a la cola. Lo que se sucede es que el vidrio tipo 1 que se usa para el inyectable es muy especial, porque no tiene que interactuar con el líquido”, prescribe.
Como conclusión asegura que el tema de los inyectables y la carrera tecnológica termina en junio de 2021, a unos 15 meses de iniciada la pandemia, en que el único bloque que tiene excedentes de vacunas es Estados Unidos que Inoculó a gran parte de su población, en un 70 %. Ayudó a sus socios estratégicos, porque Inglaterra vive el actual momento por el aporte de los americanos. Israel está toda inoculada. “Sus amigos, a los que les interesa, están todos vacunados. Una vez que hicieron esto armaron reservas para el invierno, y con el excedente están viendo dónde venden y dónde regalan”, describe. “Conclusión: los europeos la están remando en dulce de leche; los chinos lograron producir más, y ya tienen inoculadas a 600 millones de personas, pero no les alcanza, son más de 1500 millones. Los rusos, está a la vista, tienen problemas con la producción”, adelanta.
-¿Tenían otra opción los bloques ante la coyuntura?
-Creo que no. Creo que hicieron lo que debían hacer. La opción era buscar una solución propia lo más rápido posible porque sino el paráte económico era devastador. Pensá que se habían interrumpido los vuelos en todo el mundo, la industria del entretenimiento estaba bloqueada, el turismo mundial se había frenado. Y después había problemas de producción primaria porque si bien siguieron trabajando había gente que se infectaba, otros que no iban a trabajar, y ante el miedo actuaron como pudieron.
Los buenos de la película
Gustavo Samojedem asegura que la pandemia fue un punto de inflexión en el derrotero de la industria farmacológica mundial, y describe el proceso con mucha ironía. Entiende que hoy el sector se encuentra mimado y nunca se habló tan bien de ellos. “Siempre nos definieron como corruptos que inventábamos enfermedades para vender medicamentos, la mala prensa del sector era increíble. Hoy la gente nos preguntan cosas impensadas: ¿Terminaron la validación de procesos?; ¿Se puede hacer la transferencia de tecnología?; ¿Van a llegar las materias primas de Rusia?; ¿Cuándo se van a hacer los llenados en la Argentina?… pasamos a ser la vedette del momento. Y ya nadie dice que somos jodidos, explotadores y asquerosos. Mucha gente nos dice: “Así que está a 19 dólares la vacuna de Moderna, qué bien… está en precio”.
Se ríe mucho cuando describe el estado de las cosas. Hoy son los buenos de la película. Pero también hay un boom económico. Antes de la pandemia el mercado de vacunas de gripe era de 500 millones de unidades a 2 dólares cada una, de 1000 a 1300 millones de dólares. Sólo en 2020 Moderna facturó 1300 millones de dólares, y toda la industria superaría los 20 mil millones.
-¿habrá algún cambio en la industria luego de la pandemia?
-Yo creo que todos los laboratorios del mundo harán una revisión de su cadena de suministros y será distinta en adelante. La enseñanza que deja el Covid es que uno pensaba que no dependía tanto de los frascos de vidrio, la logística… el tema de los vuelos internacionales fue todo un tema. Cuando desaparecieron los vuelos la industria farmacéutica se quedó sin transporte cadena de suministros, insumos críticos y transporte y logística.
-¿Considera viable que la vacuna Sputnik V se fabrique en la Argentina?
-Sí, claro que sí. Los laboratorios argentinos tienen la capacidad de recibir la transferencia tecnológica en este caso de Rusia, porque nosotros tenemos cientos de plantas inyectables en la Argentina con capacidad de recibir, y Argentina lo que está haciendo ahora envasar la vacuna. Desde Rusia nos mandan un caldo concentrado, que llega a laboratorio Richmond, allí se lo diluye al volumen necesario para hacer el llenado de los viales y luego se hace el taponado. No es una etapa menor. Es compleja. Astrazeneca quedó atrapada en este punto porque no encontró lugares adecuados para hacer este paso.
-¿Qué cree que va a pasar en el mundo con el virus en el mediano plazo?
-Creo que en el término de 2023/2025 las cepas de Covid 19 se van a incorporar al plan de vacunación anual de los Estados de gripe habitual, y esa vacunación de gripe habitual incluyendo Covid solamente se va a volver a dar como antes a los grupos de antes a los grupos de riesgo. Así como teníamos 1500 millones de vacunas de influenza antes de esta pandemia, para ese momento volverá a descender a un número no mayor de 2000 vacunas por año. Es decir que para los laboratorios este es un negocio de oportunidad. Acá están cosechando los que ya entraron al mercado.
-¿Qué enseñanza le deja a la ciencia médica este virus complejo?
-Es al revés. Tuvimos al gran suerte que este virus no es complejo, que no es diferente a los demás virus que eran reconocidos y que permitieron hacer las vacunas en 10 meses. Este virus es un corona virus que se estudian en la universidad hace 30 años. Lo estudié yo en la universidad. No se le daba importancia porque es una típica zoonosis, que son enfermedades de los animales que no son transmisibles a los humanos. ¿Sabés cuál es el trabajo esencial de los veterinarios?
-Infiero que no sé la respuesta…
-El laburo principal de los veterinarios, su misión en el mundo científico es evitar que la zoonosis se conviertan en enfermedades humanas. Para eso están los veterinarios. Esa es su misión sanitaria, no curar a los animales.
-¿Y usted cree que esta es una zoonosis trasladada a otra especie?
-Hay una cosa que me cuesta mucho entender. Este es un corona virus que, como dijimos, es muy conocido. El cual, en la superficie de la cápside se acopla una proteína llamada Ese, que, oh casualidad, esa proteína Ese acopla perfectamente a un recepto alvéolo pulmonar humano. Y por eso se arma el problema. Ahora bien. Qué casualidad que justo esa proteína Ese que justo engancha con el alvéolo. Qué mala suerte que tuvimos. La verdad que no tengo ninguna prueba, pero las acusaciones que recibe el laboratorio de Wuhan deben profundizarse. Yo, tecnológicamente, no creo que en tantas casualidades. Hay millones de proteínas en el mundo y pueden entrar en esa capsula y justo engancha eso. Yo no tengo ninguna paranoia con los chinos, sino con científicos a los que les gusta jugar y algunas cosas no salen como lo esperás. Menos mal que era un virus muy estudiado y lo aislaron rápido en China. En EE.UU. tenían muestran del virus antes que llegara a ese país. Eso permitió tener a 15 meses más de 2000 millones de personas vacunadas en el mundo.
Gracias a Cristina
“Creo que debimos ser más agresivos a la hora de firmar contratos con todas las vacunas posibles. De alguna manera nos comimos el discurso de la vacuna europea porque nos llenaba desde muchos aspectos, porque venía de una universidad como es Oxford, porque Argentina tiene una mirada muy pro europea en general de las cosas, de ese socialismo europeo y todo fue encajando y nos cerraba, un buen laboratorio… recordemos que Astrazeneca declaró que el primer año no iban a ganar mucha plata con la vacuna y todo ese discurso nos gustó. El socio local de esa compañía, Hugo Sigman, de afinados contactos con el mundo kirchnerista y la íbamos a producir una parte en la Argentina y otra en México. Todo eso hizo que nos casáramos con un proyecto que fue el que más inconvenientes tuvo en lo tecnológico, hubo que rehacer un análisis y tuvo algunos retrasos y el que más problemas tuvo en la manufactura. Por eso salimos después a buscar ayuda de Rusia, y gracias a dios que se ve que Cristina tiene buena onda con Putin y nos mandaron vacunas que no eran del lote de exportación, sino estábamos realmente en el horno. Si Putin no mandaba esas vacunas el año pasado no tendríamos a nadie vacunado, porque recién ahora están llegando vacunas. Recién hoy están llegando los primeros lotes realmente significativos al país”, asegura el farmacéutico a la hora de ponderar a la estrategia nacional.
Ficha Técnica:
Estudios
- Farmacéutico – UBA
- Licenciando en Industrias Bioquímicas farmacéuticas – orientación Biotecnologías
- Postgrado en Marketing en la Universidad de San Andrés
- Mini MBA en el Babson College, Boston, Massachussetts
Empleos:
- Trabajó en laboratorios CIBA, MSD, ARES,
- Más de 20 años en Laboratorio suizo Serono Group –en Argentina, Estados Unidos, Suiza y México
- Laboratorio Pablo Cassara de Argentina, donde trabajó en biotecnología
- En 2007 asume como el CEO de Eriochem en Entre Ríos, Argentina
