AL DÍA PORTADA

¿Quiénes se benefician con el cierre de las exportaciones de maíz?

Los sectores avícola, porcino, feedlotero y tambero aparecen como los beneficiados por la medida adoptada por el Gobierno nacional que tanto enojo generó entre los productores. ¿Hubo lobby? Danilo Lima

La decisión de la administración del presidente Alberto Fernández de cerrar las exportaciones de maíz –en principio de manera temporaria– tensó aún más la siempre complicada relación entre los productores agropecuarios y los gobiernos peronistas.

El argumento de que la medida se adoptó dada la necesidad de asegurar el abastecimiento del grano para las actividades que lo utilizan como materia prima en sus procesos de transformación no sólo no convenció a los productores sino que levantó sospechas sobre el lobby que, eventualmente, pudieron haber hecho sectores tales como el avícola, el porcino, los feedlots y los tamberos, todos altamente demandantes de maíz.

Si bien entre las entidades que representan a los productores nadie levantó el dedo acusador, la Comisión de Enlace de Entidades Agropecuarias, tras conocerse la noticia, dio a conocer un comunicado en el que, luego de afirmar que el Gobierno volvió a defraudar al campo y a todo el interior productivo, señala que la decisión “vuelve a generar una nueva transferencia de recursos de la producción primaria a otros eslabones de la cadena”. A buen entendedor…

“Tiran la piedra y esconden la mano”.

En la comarca entrerriana, cuando DOS FLORINES realizó una ronda de consultas para evaluar el nivel de enojo que la medida había provocado en el campo, un productor se limitó a decir: “Siempre están los que tiran la piedra y esconden la mano”.

Paralelamente, a través de whatsapp, se difundía un audio del presidente del Centro de Empresas Procesadoras Avícolas (CEPA), Roberto Domenech, en el que desmentía que el sector avícola hubiera hecho gestiones para el cierre de las exportaciones.

“Nosotros no pedimos ninguna medida”, se ataja Domenech en el audio, y explica que se trata de una decisión que “el Gobierno la toma producto de una sumatoria de cosas”.

El titular de CEPA, sin embargo, admitió que “sí dijimos que no estábamos en condiciones de mantener los precios máximos del pollo como consecuencia de que en julio pasado el maíz costaba 9.000 pesos y hoy cuesta 19.000 pesos” y “la soja costaba 14.000 pesos y hoy está en 27.000 pesos, una situación imposible de manejar”.

Por lo tanto, reconoció Domenech, “no respetamos más el precio acordado” en su momento.

El empresario avícola habló de otro problema: no se consigue maíz. “Entendemos que aquellos productores que tienen maíz, con justa razón, tratan de conservar el valor de su dinero (a través de la retención del grano), pero son muchos los sectores que están involucrados en esto, como el sector porcino, los feedlots, el huevo y el pollo, la lechería. Nosotros consumimos mucho maíz –hace 90 días que es muy difícil conseguirlo– y queda muy poco grano disponible, y, además, también pujamos con los exportadores”, admitió Domenech, y remarcó que “han cambiado mucho las condiciones de pago y lo único que nos falta es pagar al contado anticipado”.

Comentó, asimismo, que hace 45 días “que no podemos completar la fórmula de alimento como corresponde, con el 63% de maíz, y estamos entre un 40 y 50%”, por lo que expresó su esperanza de que la medida del Gobierno, tan cuestionada por los productores, “repercuta y aparezca el flujo de maíz hasta que llegue la nueva cosecha”.

Medida inconsulta.

Mientras tanto, el presidente de la Cámara de Productores Porcinos de Entre Ríos (Capper), Francisco Benedetti, en diálogo con este portal, dijo que la noticia del cierre de las exportaciones de maíz “nos tomó por sorpresa” y subrayó que “no hubo ningún pedido de nuestro sector” para que el Gobierno adoptara una decisión en ese sentido.

“Es una medida inconsulta” y se toma “cuando falta poco para que comience la cosecha de maíz en la provincia por lo que en febrero ya vamos a tener maíz nuevo”, añadió Benedetti, para quien esta medida “no ayuda al sector agropecuario en general” porque se trata del “regreso a recetas que han fracasado”.

El presidente de Capper, sin embargo, habló de “una resistencia a vender a plazo” y recordó que para esta época “siempre es complicado” conseguir maíz. “Lo que sí ha cambiado es que hemos tenido que acortar los plazos de pago, para conseguir maíz hay que pagar con plazos más cortos”

Tamberos, a favor.

La Junta Intercooperativa de Productores de Leche (JIPL), en tanto,  consideró que la resolución oficial es “una medida coyuntural” y “momentáneamente favorable”.

El presidente de la JIPL, Danny Lorenzatti, aclaró que se trata de “una medida coyuntural momentáneamente favorable, si realmente se respeta la redacción del comunicado oficial”, y remarcó que el aumento del precio del maíz en el mercado internacional, uno de los principales insumos en el tambo, “pega en los costos de producción de leche, que son en dólares, mientras el precio de venta de la leche es en pesos.

Más allá de los lobbies, el responsable es el Gobierno.

Guillermo Bernaudo, ex jefe de Gabinete del Ministerio de Agroindustria y ex secretario de Agricultura durante el gobierno de Mauricio Macri, al ser consultado por DOS FLORINES sobre si creía que el cierre de las exportaciones obedecía a la presión de los sectores avícola y porcino, evitó pronunciarse.

“Prefiero no opinar sobre quién pudo haber hecho lobby. Cada sector podrá hacer lobby para lo que quiera, pero acá la decisión es del Gobierno y la responsabilidad es 100% del oficialismo, del ministro de Agricultura, Luis Basterra; del secretario de Agricultura, Julián Echazarreta; y del subsecretario de Mercados Agropecuarios, Javier Preciado Patiño, ellos son los responsables de esta medida desacertada”, subrayó Bernaudo.

Deja un comentario