Para llegar a la meta del 1,3 % en 2019, habrá que ajustar por 140.000 millones
30/07/2018
Un informe del Iaraf asegura que cumplir con un déficit, el año próximo año el gasto debe bajar sensiblemente.
El Instituto Argentino de Análisis Fiscal que dirige el economista Nadín Argañaraz –acompañado por Ariel Barraud y Valentín Mongi- presentó este lunes un nuevo informe donde asegura que en 2019 el gasto público no ajustable automáticamente por inflación debe bajar $140.000 millones para cumplir con la meta de déficit primario de 1,3% del PIB. De este modo, el ajuste será la directriz clave de la variable política y económica en los próximos meses.
Aseguran que se busca aportar elementos a partir de las proyecciones fiscales 2018 y 2019 que el gobierno nacional ha compartido con las provincias en las reuniones de los últimos días y a partir de las mismas se han cuantificado los recortes de gasto necesarios.
“Hay solamente dos maneras de cuantificar el recorte. Una es hacerlo sobre el gasto proyectado para 2019 y otra sobre el gasto proyectado 2018. Del análisis surge que si el recorte se calcula sobre el gasto proyectado originalmente para el 2019, el monto es de $360.000 millones. Así se cumple con la meta de déficit primario de 1,4% del PIB. Por otra parte, si el recorte se calcula sobre el gasto proyectado 2018, es de $140.000 millones”, expresa el abstract del trabajo técnico fiscal.
Variables.
El trabajo parte de advertir el inició de la discusión entre Nación y Provincias para definir el camino que permita alcanzar un déficit primario de 1,3% del PIB en 2019. En principio se ha establecido que continúa la baja de impuestos nacionales y que por ende el gasto público no ajustable automáticamente por inflación debe bajar en una magnitud tal que permita compensar la pérdida de recaudación, la suba del gasto ajustable automáticamente por inflación y además permitir que el déficit se reduzca desde el 2,7% del PIB este año al 1,3% del PIB el año que viene.
Se ha planteado que a las dos terceras partes del ajuste necesario del gasto lo va a afrontar Nación y a la tercera parte restante lo absorberán las provincias a través demenores transferencias no automáticas o menores gastos (subsidios al transporte por ejemplo) realizados por el gobierno nacional en sus distritos. En este último caso pasaría a depender de cada provincia la decisión de mantener o no el subsidio que hasta 2018 financie Nación. En caso de optar por mantenerlo, será un gasto que deberán afrontar con sus recursos.
“Considerando que es vital la reducción del déficit primario como porcentaje del PIB, resulta esencial que la discusión del recorte entre los actores involucrados sea con un criterio claro y preciso. La sociedad debe tener pleno conocimiento de la magnitud del ajuste que requieren las cuentas públicas argentina”, expresan los economistas.
El día 16 de julio se publicó el informe “Es clave una discusión correcta: en 2019 el gasto público nacional debería crecer entre $280.000 millones y $330.000 millones para cumplir la meta de déficit primario de 1,3% del PIB”, donde IARAF, con el objetivo de aportar elementos que clarifiquen la discusión, proyectó los cuadros fiscales nacionales para 2018 y 2019. En ese documento se llegó a la conclusión que en un escenario de baja de impuestos nacionales sería necesario bajar el gasto público nacional no ajustable automáticamente por inflación proyectado para 2018 en $148.000 millones. Es decir que, nominalmente, este gasto presupuestado para 2019 debería ser $148.000 millones menor al nivel con el que cierre este año 2018. Habiéndose dado a conocer las proyecciones de ingresos y gastos tanto para 2018 como 2019 que el gobierno nacional está proveyendo a los gobiernos provinciales, parece oportuno directamente trabajar con esos valores y recalcular el ajuste necesario del gasto público para cumplir con la meta.
Conclusión.
“Concretamente, los números oficiales prevén una baja en relación al PIB de los Ingresos Totales en relación a 2018 (-0,55 puntos porcentuales) y una suba del componente automático del gasto primario (+0,57 p.p.). Sumado a que el déficit primario tiene que bajar 1,4p.p., la baja necesaria en el componente no automático del gasto primario debe ser equivalente a 2,52 p.p. Por otro lado, el gobierno nacional ya prevé en sus proyecciones que el componente no automático del gasto baje 0,32 p.p. En suma, el componente no automático del gasto debe presentar un ajuste nominal extra para bajar su participación en el PIB y lograr aportar los 2,2 p.p. necesarios para alcanzar la meta fiscal. Es decir que de la participación en el PIB que el gobierno nacional proyecta originalmente para el gasto no automático, deben restarse 2,2 p.p., facilitando de esa manera el logro de la meta del 1,3% del PIB”, subrayan desde el Iaraf.