La futura canciller afirmó que se eliminarán restricciones pero alertó sobre la escasez de energía; ratificó que la Argentina no se sumará a los Brics.
Diana Mondino, futura canciller del gobierno de Javier Milei, habló en el marco de la 29 conferencia de la Unión Industrial Argentina (UIA). En ese marco, expresó: “Muchachos, si llegaron hasta acá, aguanten seis meses más, que éste va a ser el mejor país del mundo”.
En una charla de cuarenta minutos con Diego Coatz y Luis Tendkarz en el centro de convenciones porteño, la economista y número puesto para asumir en la Cancillería en diez días intentó alentar a la industria a colaborar con la nueva etapa. De todos modos, sinceró que muchos de los problemas y trabas de la economía “son difíciles de resolver” y llevarán tiempo.
Uno de los mayores problemas que vislumbró es el de la escasez de energía durante el verano, si la economía se reactiva. “En enero y febrero, el que no tenga un generador, vayan comprándolo, porque no alcanza para todos”, pronosticó.
Definiciones
“Lo primero que hay que reconocer son las restricciones, una cantidad de regulaciones enorme para la exportación. Argentina, por algún extraño motivo, considera que los dólares no son del que exporta, sino del Banco Central. Lo más pronto que se pueda, hay que llegar a que los dólares sean del exportador, pagará impuestos, pero es indispensable que tenga un incentivo para seguir produciendo”, aseveró.
Enseguida, habló de “innovación tecnológica”, y de “cambiar el chip” para exportar e importar más. Aseguró que el Mercosur “debe avanzar mucho más rápido” en la unificación de legislación para exportar, aunque pidió “tener cuidado” con algunas especificidades en los productos.
Se mostró confiada en alcanzar el acuerdo UE-Mercosur, que permitirá “reducir tiempos, costos operativos, y se va a eliminar la discrecionalidad”, más allá de que el Gobierno aún duda de firmar el acuerdo antes de la finalización del mandato de Alberto Fernández. Estimó que además de la UE, se abren para el país mercados y “puertas monumentales” como el EFTA, Singapur o Asia. “Si a alguien le duele el pie, bueno, le dolerá. Pero si esperamos que le guste a todos no avanzamos”, definió.
Brics y gasoducto
Además, ratificó que la Argentina no formará parte de los Brics, como había gestionado la actual gestión. Mondino dijo “no ver ventajas” en la incorporación al foro que reúne a Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, y que después de la última cumbre resolvió ampliar su membresía.
“Entiendo que fuimos invitados a participar de los Brics pero no hemos aceptado formalmente”, dijo en declaraciones periodísticas.
Durante la charla con los industriales, Mondino abogó por una mayor participación del sector privado en las obras de infraestructura, apuntando de modo directo al gasoducto Néstor Kirchner, cuyo último tramo fue inaugurado en julio pasado en Salliqueló. “¿Por qué el gasoducto tenía que ser estatal? La quinta línea tiene que ser privada, y la sexta si se concreta también”, afirmó.
En relación a la deuda externa, Mondino aclaró que “la deuda total con todos los organismos internacionales no llega al 18 por ciento de la deuda total. No es culpa del FMI que estamos como estamos”, afirmó. En relación a la carga impositiva, calificó de “tragedia para las empresas” la continuidad del impuesto al cheque. Un rato antes había hablado de la necesidad de “simplificar impuestos, porque hay cosas que están gravadas tres veces”, por medio del IVA, Ingresos Brutos y e impuestos municipales.
Recursos
Reiteró que “los exportadores, no mañana, pero sí en un tiempo, van a poder disponer de sus dólares”, y anticipó que se pondrán en marcha modificaciones “laborales y previsionales” que consideró fundamentales para la etapa que viene. “Hoy Argentina tiene un gasto público demás del doble que hace 20 años, y los servicios que presta el Estado no son el doble de eficientes”.
Allí fue donde advirtió que la demanda energética en el verano podría ser mucho mayor que la oferta, porque “si se llega a reactivar un poco la industria, no hay para todos. Hagan algo porque no alcanza para todos”, se despachó, y detalló los “costos logísticos” como otra de las trabas a la exportación.
Luego de abogar por la “autonomía de las provincias, pero también su responsabilidad” en el manejo de los fondos, la futura canciller reiteró que “el mensaje es que la gente quiere un cambio”, “Hay un compromiso absoluto de desregular, quitar, modifica, convertirnos en un país normal” y allí pidió los seis meses de paciencia, los primeros de Javier Milei en el poder.