La presión tributaria bajó 1,4 puntos del PIB entre 2015 y 2017
08/03/2018
Según Iaraf se trata de la caída en la presión tributaria efectiva nacional más significativa en los últimos 20 años. Dos Florines
El Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf) presentó ayer un nuevo informe donde analiza la trayectoria que tuvo la recaudación tributaria nacional a lo largo de los últimos dos años, evaluando lo sucedido para sus principales componentes, tanto en términos nominales como reales.
Según el documento presentado por el instituto que lidera Nadín Argañaraz, se analiza la evolución reciente de la presión tributaria efectiva nacional, medida como la recaudación en porcentaje del Producto Bruto Interno.
En el mismo, se advierte que la recaudación tributaria del gobierno nacional, incluyendo recursos de la Seguridad Social, creció en 2016 y 2017 un 34,6 % y 24,6%, respectivamente, en términos nominales.
“”Ahora bien, si se deducen los recursos extra ingresados por el blanqueo de capitales en
ambos años, el crecimiento habría sido del 27,3% en 2016 y 29.8% en 2017. Descontando la inflación a lo largo del período, la performance de la recaudación tributaria nacional en términos reales fue del -1.8% y -0.8%, en 2016 y 2017 respectivamente para el total de recursos, mientras que considerando la recaudación neta de blanqueo en el año 2016 se habría registrado una caída del 6,6% y en 2017 un recupero del 2,8%. De esta forma, se aprecia claramente un mejor desempeño en materia de recaudación en el año 2017. Más allá de esta mejora en 2017, si se analiza el período acumulado 2015-2017, la recaudación real evidenció una caída del 2,5% y neta de blanqueo del 4%”, expresa el trabajo técnico.
Evolución.
Para comprender las causas de esta trayectoria, el equipo de profesionales desagregó el desempeño de los principales componentes de la recaudación tributaria en términos reales para el
período 2015-2017. Se aprecia –dicen- que los tres principales tributos que explican la caída en la recaudación total en términos reales fueron los Derechos de Exportación, el impuesto a los Bienes Personales y el Impuesto a las Ganancias, con mermas del 49%, 30% y del 15.5%, respectivamente. En efecto, estos tres tributos fueron los principales ejes de la rebaja tributaria nacional iniciada
en el año 2016.
Los ingresos obtenidos por Aportes y Contribuciones a la Seguridad Social y por IVA se mantuvieron relativamente estables en términos reales en los últimos dos años, presentando una suba acumulada del 2% y 1,3%, respectivamente. En el caso del Impuesto a los Débitos y Créditos Bancarios (Impuesto al Cheque), la suba real entre 2015 y 2017 fue del 3%.
Por el contrario, los impuestos Internos y los Derechos de Importación fueron los que registraron las mayores subas, también en términos reales, entre los años 2015 y 2017.
Cambios.
La dispar evolución entre los componentes de la recaudación tributaria nacional generó modificaciones en la estructura tributaria de cada año. Se aprecia que IVA, principal componente de la estructura tributaria argentina, aumentó ligeramente su participación en la recaudación nacional (neta de blanqueo), pasando de representar un 27,6% en 2015 a un 29,1% del total de recursos en 2017.
El segundo componente de importancia, los Aportes y Contribuciones a la Seguridad Social, también incrementaron su relevancia en los recursos fiscales, de un 26,1% en 2015 a un 27,7% en 2017.
Por el contrario, el Impuesto a las Ganancias redujo en los pasados dos años su participación en la recaudación tributaria, de un 24,8% a un 21,8%, en línea con la caída en la recaudación en términos reales presentada en el apartado previo. Cabe aclarar que esta reducción de 3 puntos porcentuales en la participación del impuesto a las Ganancias obedece a la readecuación que se comenzó a realizar en el año 2016 de los parámetros de cálculo del impuesto, que habían permanecido con anterioridad prácticamente inalterados en relación a la inflación, lo cual había generado numerosas distorsiones en la aplicación de este tributo.
Los Derechos de Exportación también disminuyeron su participación en la estructura de recursos, en consonancia con la rebaja de alícuotas aplicada con el cambio de gobierno.
El Impuesto al Cheque aumentó su participación en la recaudación, de un 6,3% a un 6,8% en el período bajo análisis, mientras que otros tributos indirectos como los impuestos internos lo hicieron de un 2% a y un 2,7%.
Presión.
“La recaudación tributaria expresada en términos del Producto Bruto Interno es uno de los indicadores más comúnmente utilizados para medir la Presión Tributaria Efectiva de un país, ya que representa el monto de los recursos generados por una economía que el Estado retrae para el financiamiento de sus actividades”, expresan, confirmando que la presión tributaria efectiva del nivel nacional de gobierno presentó un crecimiento sostenido a lo largo de los últimos 15 años, habiendo alcanzado un pico máximo en el año 2015, en el que la recaudación nacional representó el 26,3% del PIB.
“En los últimos 2 años y producto de las rebajas que comenzaron a aplicarse en ciertos tributos luego del cambio de gobierno, la presión tributaria (neta de ingresos del blanqueo) evidenció ligeras reducciones, pasando a un 24,3% y 24,9% del PIB en los años 2016 y 2017, respectivamente”, concluyen.
Componentes.
Asimismo, cuando se desagrega entre los componentes de esta reducción en la presión tributaria de 1,4 puntos del producto entre 2015 y 2017, se desprende que el Impuesto a las Ganancias y los Derechos de Exportación fueron los factores explicativos. Particularmente, la recaudación del Impuesto a las Ganancias redujo su importancia en un punto del PIB, mientras que los derechos de exportación disminuyeron en 0,65 puntos del producto.
Lo anteriormente presentado constituye el punto de partida, en cuanto a nivel y a estructura, de la reforma tributaria sancionada en diciembre de 2017, que contempla rebajas en los principales impuestos como Ganancias, Seguridad Social e Impuesto al Cheque, entre otros. Es de esperar que a partir del 2018 año se registren nuevas reducciones en la presión tributaria y cambios en la estructura de la recaudación nacional, finaliza argumentando el informe.