La nueva UPL se presentó en sociedad en Expoagro 2019
26/03/2019
Rodrigo Ramírez, el gerente general en Argentina, enumeró los objetivos de la nueva compañía que tras la adquisición de Arysta LifeScience se proyecta como una de las cinco principales proveedoras globales de soluciones para la agricultura. Dos Florines
Hace pocas semanas, UPL anunció el cierre de la operación de adquisición de Arysta LifeScience a nivel global. En Expoagro, Rodrigo Ramírez, el nuevo gerente general de la compañía en la Argentina, detalló cuáles serán los primeros pasos de la empresa en el país.

Durante una rueda de prensa con Pool de Periodistas –que integra DOS FLORINES–, Ramírez señaló que la nueva UPL “aporta soluciones para todas las etapas de los cultivos”. La compañía, remarcó, “ofrece tecnologías para vencer la resistencia de malezas, enfermedades e insectos, también para el manejo del estrés y la bioestimulación de las plantas, dispone de un paquete denominado Pronutiva que incluye biosoluciones y protección para todo el ciclo de los cultivos, a lo que se suman productos para el establecimiento de las plantas y para la etapa de post cosecha”.
Ramírez, asimismo, hizo especial hincapié en subrayar que el propósito de la compañía está detrás del concepto OpenAg, basado “en una agricultura abierta apoyada en la consolidación de alianzas, la construcción de redes en pos de la creación de valor y el aporte para el crecimiento sostenible”.

Un ejemplo de esto es la iniciativa que vienen impulsando en el norte de Córdoba con el soporte de la Red Agropecuaria de Vigilancia Tecnológica (RAVIT) a partir de la cual se genera conocimiento de primera mano, con la intervención de los productores, en 1,5 millones de hectáreas.
Productos.

Ramírez se refirió al portfolio integrado de soluciones en protección de los cultivos y biosoluciones y anunció el lanzamiento de tres nuevas tecnologías que estarán disponibles para los productores en la próxima campaña.
Una de ellas es Tridium, el primer fungicida del país con tecnología multisitio para trigo y cebada, una herramienta clave que no sólo permite controlar enfermedades y aumentar el rendimiento sino también manejar la resistencia.
A este lanzamiento se sumaron dos herbicidas: Tripzin, para el control de malezas gramíneas y de hoja ancha para aplicación pre- emergente en soja; y Dinamic soja, un herbicida pre-emergente para malezas de hoja ancha de difícil control.
– ¿Por qué el tema malezas, en los últimos años, desbordó a la agricultura argentina? ¿En qué se falló?
– Es consecuencia, básicamente, de 18/20 años de un mismo sistema productivo, basado en la soja como único cultivo.
Lo que estamos viendo ahora es resultado del monocultivo de soja –y no critico a quienes lo hicieron porque era lo único que se podía hacer para sobrevivir–, y de tecnologías antiguas. Este problema creció de manera exponencial y nos pasó por encima, a pesar de que en los últimos siete años se más que duplicó el mercado de herbicidas no glifosato. No encontramos la solución al problema, entonces que hay que buscar un cambio de escala para poder entender esta problemática desde otra perspectiva. Tenemos que anticiparnos a nuevos problemas, ésa es la estrategia.
– Esto significa que la agricultura va a convivir durante muchos años más con las malezas…
– Definitivamente. Esto llegó para quedarse. El 80% de los productores, según una encuesta realizada por Aapresid, cree que el problema de las malezas continuará avanzando y cuabndo lo vemos en la práctica es así.
Acuerdo.
En Expoagro, el gerente general de la nueva UPL en Argentina anunció también la firma de un acuerdo con la Secretaría de Emprendedores y de la Pequeña y Mediana Empresa (Sepyme), que depende del Ministerio de Producción y Trabajo de la Nación. El ejecutivo destacó que dicho convenio tendrá como finalidad impulsar la formación, crecimiento y aceleración de emprendimientos de alto impacto y nuevas empresas con base tecnológica, facilitando así el intercambio y exportación de servicios relacionados con Agtech. Concretamente, la iniciativa busca generar vínculos que promuevan la inserción de desarrollos tecnológicos agrícolas locales en un mercado de gran potencial como el de la India, con 150 millones de hectáreas de cultivos, 120 millones de productores y 60 millones de hectáreas bajo riego, y puerta de acceso para toda Asia.
Fotos: Norberto Melone