Se remarcó la imposibilidad de tomar créditos debido a las altas tasas de interés. No hubo referencias, al menos en forma pública, a la vuelta de las retenciones. Danilo Lima
Con tres mendocinos y un pampeano como presidentes de sus respectivas entidades, la Mesa de Enlace nacional se reunió este miércoles en la sede de la Sociedad Rural Argentina (SRA) para analizar los temas que preocupan al sector y, además, asumir el compromiso de mantener encuentros periódicos cuando lo crean pertinente.
Daniel Pelegrina (el mendocino de la SRA), Carlos Iannizzotto (el mendocino de Coninagro), Carlos Achetoni (el mendocino de la Federación Agraria) y Dardo Chiesa (el pampeano de Confederaciones Rurales Argentinas) retomaron, de esta forma, la agenda de los temas transversales al campo. Además de los “caciques” agropecuarios participaron varios dirigentes de las cuatro entidades, entre ellos los entrerrianos Elvio Guía, vicepresidente 1º de la FAA, y Edelmiro Oertlin, secretario de Coninagro.
En un escueto comunicado de prensa, dado a conocer casi en forma simultánea por los responsables de comunicación de las cuatro entidades, se señaló que durante la reunión se destacó “la preocupación por la situación financiera” en particular “por las altas tasas de interés y la imposibilidad que implica tomar créditos para producir en esas condiciones”.
En este sentido, se agrega en el texto, los participantes “acordaron abocarse en los próximos días a la búsqueda de mecanismos alternativos de financiamiento, tales como la financiación a valor producto y otras iniciativas similares”.
En el comunicado, finalmente, se expresa que “existió consenso en torno a la propuesta de continuar reuniéndose periódicamente con la urgencia que los temas prioritarios ameriten para seguir trabajando en la nutrida agenda que preocupa al agro”.
En la información suministrada por la Mesa de Enlace no hay ninguna referencia, ni a favor ni en contra, a la decisión de la administración del presidente Mauricio Macri de reinstaurar las retenciones a las exportaciones –algo que hubiera sido la primera queja con cualquier otro gobierno– ni de la reducción de los reintegros. Tampoco hay alusión alguna a la crisis terminal de los pequeños y medianos productores tamberos ni al golpe durísimo que significaron aquellas medidas para las economías regionales.
Estos temas, tal vez, hayan sido analizados por los dirigentes agropecuarios –es difícil imaginar lo contrario– pero evidentemente la decisión de la Mesa de Enlace fue evitar cualquier referencia pública al respecto.
