El titular de la empresa, Héctor Motta, confirmó a DOS FLORINES que los resultados de los testeos realizados dieron negativos y aclaró que sus granjas no están en General Racedo. Nahuel Amore
La detección del primer caso de Influenza Aviar en Entre Ríos encendió las alarmas en el sector avícola de la provincia, por ser la principal productora y exportadora del país. El foco fue detectado por el Senasa en una granja comercial de la localidad de General Racedo, lo que de inmediato obligó a activar las medidas de control y sacrificar unas 13.000 aves.
Por tratarse de la zona donde opera Grupo Motta, desde la firma comunicaron a DOS FLORINES que se descarta la presencia de gripe aviar en la empresa y aclararon que el caso no pertenece a sus granjas. Según indicó el propio Héctor Motta, presidente del complejo agroindustrial avícola, “todos los testeos realizaron dieron negativos“.
“Las muestras procedentes de establecimientos cercanos al brote de Entre Ríos resultaron negativas a Influenza Aviar“, indicó el empresario, quien aclaró que se están llevando a cabo testeos en las granjas ubicadas en un radio de 10 kilómetros a la redonda de donde se localizó el primer foco.
En ese sentido, desde la empresa enfatizaron que Grupo Motta no tiene granjas en Racedo. “En la localidad tenemos plantas de incubación y plantas de procesados“, diferenció, con interés en llevar tranquilidad a la comunidad. Precisamente, las granjas con ponedoras se encuentran en Conscripto Bernardi, departamento Federal.
De todas maneras, una vez conocido el caso durante el fin de semana en dicha localidad y si bien descartan que se trate de Grupo Motta, la empresa extremó los protocolos de bioseguridad, con especial vigilancia en las plantas de faena.