El analista económico señala que de acuerdo a su indicador, que obtiene a través de una fórmula de regresión múltiple en la que compara el precio de la leche en polvo entera (LPE) en Europa con los precios de maíz, soja, y petróleo en el mercado internacional, la LPE debería valer 4.200 US$/T. “La fórmula surge de la relación de precios que hubo mes a mes durante los últimos 12 años”, explicó Quintana.
En la última licitación del Global Dairy Trade, la LPE se mantuvo por encima de 5.100 US$/T y la descremada registró un alza superior al 27%. Pero el dato más importante es que de acuerdo a los próximos contratos, el lácteo seguirá aumentando hasta alcanzar un valor superior a 6.000 US$/T en agosto. “Nada que genere semejante desequilibrio en un mercado es bueno, más en un mercado como el nuestro donde siempre hay un desfasaje entre precio y oferta”, afirmó.
Al ser consultado sobre cómo puede impactar el alza del precio de la leche en polvo en nuestro país, Quintana aseveró que va impulsar un aumento fuerte de producción que va a llegar al mercado cuando este ya no lo necesite. “En lo interno el riesgo latente de intervención está siempre presente”, agregó. “Por otro lado, viendo los balances de Sancor y La Serenísima, con pérdidas de a 25 millones de pesos por trimestre, esta situación le permitirá equilibrar sus cuentas”, indicó.
Asimismo, Quintana recalcó que a la hora de analizar este escenario hay que tener en cuenta que, por un lado, la subastas de Fonterra no se reflejan en el mercado en toda su magnitud, y por el otro, si se observan los contratos a septiembre y octubre, los precios de la leche en polvo entera bajan y mucho (4.770 y 4.605 U$S/T). “El mercado ve un problema desde ahora hasta agosto, cuatro meses nada más”.
Fuente: Tres Líneas/Lechería Latina en Punto Biz