El desafío de las pymes es “pensar la exportación como la base del negocio”
15/03/2019
Con el apoyo de Argentina Exporta, la Feder convocó a empresas para conocer herramientas y experiencias de comercio exterior. Nahuel Amore
En medio de las severas dificultades que presenta el mercado interno recesivo, la Federación Económica de Entre Ríos (Feder) organizó un seminario para aquellos pequeños y medianos empresarios que tengan en mente aprovechar las bondades del comercio exterior. “Desafío exportador, una nueva oportunidad para las pymes”, fue el título del evento en Paraná, que puso en debate una serie de herramientas prácticas y teóricas, además de experiencias de éxito en la región.

El encuentro, que contó con el acompañamiento de Argentina Exporta del Ministerio de Producción de la Nación, es una prueba piloto en el país, que nació de una necesidad planteada por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) al presidente Mauricio Macri. Justamente, la intención es generar capacidad instalada en materia de exportación, que posibilite romper no sólo las barreras imaginarias de las fronteras, sino las del desconocimiento, la burocracia y principalmente de la mentalidad de las pymes.
Andrés Tacsir, asesor Senior de Argentina Exporta, dialogó con DOS FLORINES y puso en palabras el espíritu de la jornada intensiva de capacitación. En este sentido, hizo hincapié en la necesidad de que las pymes cambien la cabeza y empiecen a “pensar la exportación como la base del negocio”. Al respecto, destacó la importancia de generar productos con calidad de exportación, independientemente si el destino es otro país, con la intención de crear esa cultura exportadora y competir contra las importaciones.

Por otro lado, Tacsir planteó los ejes centrales de la política oficial para generar las condiciones propias para facilitar a las pymes la llegada al exterior. Al respecto, destacó los avances y deslizó críticas a la gestión anterior. “Argentina viene de una destrucción importante de toda la infraestructura vinculada al comercio exterior. Estamos dando estos pasos para estar a la misma altura que otros países”, sostuvo.
—Independientemente del contexto -por la caída del mercado interno-, ¿qué sostiene la necesidad de impulsar las exportaciones desde el sector pyme?

—Hoy en Argentina hay menos de 10 mil empresas que exportan, de las cuales sólo el 30% exporta en forma sustentable, es decir, que exportan por lo menos tres años. Nosotros queremos triplicar el volumen de exportaciones para el año 2030 y para eso necesitamos que más pymes exporten. Pensamos que todas las empresas argentinas pueden exportar. Por eso, estamos trabajando transversalmente. Para que puedan hacerlo, una de las cosas críticas que tienen que hacer es cambiar la mentalidad hacia una cultura exportadora. Eso requiere pensar la exportación como la base del negocio, no como el lugar donde logro encajar algunos saldos que me sobraron. Tengo que pensar mi empresa como exportadora. Para hacerlo, me tengo que meter en la fábrica, en el negocio, en el taller, para mejorar el producto; tengo que explorar el mundo para entender la calidad que me piden y hacer otro montón de cosas. Es un desafío exportar, que lleva mucho trabajo, pero nos parece que la única forma de hacerlo es si las pymes se comprometen realmente. Nosotros ahora estamos comprometidos a darles todo el apoyo que podamos a las empresas para que puedan recorrer ese camino.
—Ahora bien, ante la crisis que presentan las pymes ¿cómo hacer para que puedan meterse en la cabeza esta posibilidad de trascender las fronteras?
—Entendemos claramente las dificultades macroeconómicas, la falta de financiamiento y los problemas que enfrentan todas las empresas en la Argentina. Pero al mismo tiempo sabemos que con los ejes que estamos abordando en Argentina Exporta, nos parece que va aumentar la productividad sistémica de la economía, permitiendo que todas las empresas, a pesar de la macro, tengan productos con más chances de ser exportados. La macro que no funciona bien -que se está tratando de arreglar y que está mejorando-, es una restricción. Pero una restricción más importante es que vos no tengas en tu empresa productos de calidad que se puedan vender. Y ahí apuntamos, a tratar de mejorar toda la infraestructura pública y privada, que exista, para poder reorientarla hacia la exportación.
—¿Desde qué aspectos se generan concretamente las condiciones necesarias que allanen el camino a quienes quieran exportar?
—Tenemos cinco ejes principales en el plan. Nosotros pensamos que si logramos abordar y avanzar en esos cinco puntos, todas las pymes de la Argentina, no importa el sector, van a estar en mejores condiciones para exportar. Podemos dar algunos ejemplos, como el tema de capacitación. Hoy las pymes no logran capacitarse, no logramos llegar con planes de capacitación de la forma que nos gustaría. Hay muchas que quieren hacerlo, pero esa información no está disponible o no la conocen. Por eso, tenemos que trabajar capacitando. También tenemos que hacer que conozcan cómo son los procesos para hacer mejores productos de calidad. Hay un montón de cosas, que si trabajamos de manera más coordinada y si reorientamos los recursos, vamos a hacer que las chances aumenten para que las pymes exporten.
—Históricamente la burocracia mató a varios empresarios en el camino, ¿creés que se avanzó en facilidades que achiquen la brecha entre las ganas y la concreción de las operaciones?
—Sí. Uno de los ejes del plan es la facilitación. Es uno de los puntos donde se han hecho grandes avances. Hasta hace poco, la burocracia para exportar era gigantezca y era una barrera que hacía que las empresas no quisieran exportar. Hemos hecho mucho trabajo, que se ha articulado alrededor de un eje principal que es la Ventanilla Única de Comercio Exterior (VUCE), que ordena todo el tramiterío para exportar. Esto fue lanzado en diciembre en la versión 1.0. Esperamos en diciembre tenerlo terminado. Es una herramienta en sí misma muy buena, que obliga a otras oficinas, áreas y organismos, como el Senasa y la Aduana, a ordenarse en función de eso. Creo que es importante entender que no es una innovación, sino que existe hace 10 años en otros países. Argentina viene de una destrucción importante de toda la infraestructura vinculada al comercio exterior. Estamos dando estos pasos para estar a la misma altura que otros países.