¿Cómo será el nuevo mercado concentrador que reemplazará a El Charrúa?
28/02/2021

Estará ubicado en un predio de 14 hectáreas y se llamará Parque Agroalimentario de la Ciudad de Paraná. Será administrado a través de una sociedad de economía mixta y la inversión inicial trepa a 470 millones de pesos, fondos que aportará la Nación. A la actividad propia de un mercado mayorista, sumará ventas minoristas y la realización de ferias y eventos especiales. Incluirá espacios para la educación y la cultura. Danilo Lima
Con una inversión inicial de 470 millones de pesos –de un total estimado en 1.500 millones–, la Municipalidad de Paraná está decidida a encarar la construcción del nuevo mercado concentrador de frutas y verduras, que se denominará Parque Agroalimentario de la Ciudad de Paraná y reemplazará a El Charrúa.

El proyecto, acaso uno de los más ambiciosos que tiene en carpeta la administración municipal, ya fue presentado al ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, quien, según señalan en la Comuna, quedó entusiasmado con la iniciativa. El respaldo del funcionario nacional es clave dado que de esa cartera provendrán los fondos necesarios para encarar la obra: 470 millones de pesos para la primera etapa, 323 millones para la segunda, y el resto para las etapas tres y cuatro.
El proyecto no se limita sólo a un espacio para la comercialización mayorista sino que, además, incluye la construcción de oficinas, aulas-taller, salas de conferencia, comedores y alojamiento para camioneros. Prevé, asimismo, la instalación de viveros, la realización de ferias y eventos especiales, y la comercialización a minoristas.

“De lunes a viernes la actividad central será la actividad propia de un mercado mayorista, pero la idea es que los sábados y domingos ese espacio sea utilizado por feriantes y emprendedores que en la actualidad trabajan en las ferias que organiza la Municipalidad. Es decir, Paraná va a tener un parque hortícola los siete días de la semana, con distintas actividades”, le dijo a DOS FLORINES Eduardo Macri, el secretario de Hacienda, Inversión, Empleo, Ciencia y Tecnología de la Municipalidad, y agregó: “Pensamos también en que los espacios del parque sean aprovechados para la realización de actividades educativas y culturales”.
El predio elegido tiene una superficie de 14 hectáreas y es propiedad de la Asociación de Productores Hortícolas de Entre Ríos, entidad que decidió donarlo, con cargo, al Municipio. “El cargo es hacer el nuevo mercado, para lo cual vamos a conformar una sociedad de economía mixta –la cuestión jurídica está bastante avanzada– en la que el Estado municipal tendrá la acción de oro lo que le permitirá aprobar o no las acciones que propongan los privados”, explicó Macri.

La producción hortícola paranaense “sólo cubre el 20% del consumo de la ciudad por lo que hay mucho para crecer” y “el objetivo de la gestión del intendente Adán Bahl es que ese crecimiento esté en manos de productores locales”, remarcó el secretario de Hacienda.
Para que Paraná crezca en materia de producción hortícola se necesitan, entre otras cuestiones, más productores y para eso desde la Municipalidad prometen trabajar fuertemente en el fomento de la actividad a través de capacitaciones, entrenamientos y entrega de tierras a través de comodatos. Macri, además, quiere darle impulso a la floricultura porque en Paraná, aseguró, “hay mercado” para esa producción.
Detalles del proyecto.
La Municipalidad le encargó el proyecto al estudio Cassano & Asociados y en él trabajaron Marcelo Cassano, Andrés Milos, Arturo Cassano, Luis Guerra y Florencia Cernigoi, quienes presentaron un argumentado trabajo en el que describen con detalle el sistema agroalimentario y cómo son los principales mercados concentradores del país y el exterior, al tiempo que realizan una caracterización de los actores productivos de Paraná.
Efectúan, asimismo, un repaso histórico de la arquitectura e infraestructura de las industrias de la ciudad. Concluyen, en este sentido, que es necesario realizar una corrección tipológica de los mercados mayoristas tradicionales. En consecuencia, se reemplazará “la circulación central con puestos mayoristas de venta a ambos lados, por una calle que sólo tiene puestos mayoristas en uno de sus lados y posee puestos transitorios de venta de horticultores en el otro”, señalan los profesionales, y destacan que esta acción genera “múltiples ventajas”. Por un lado, la circulación de compra se abre a un parque público apéndice del arroyo Las Tunas. Y, por el otro lado, los puestos de productores locales pueden realizar sus ventas mayoristas los días de semana dentro del mercado y, girando hacia el exterior, vender al minorista en el parque los fines de semana y feriados.
“Con este cambio tipológico, el mercado abandona su lógica introspectiva y se abre a un gran parque público productivo, cumpliendo el rol tanto de infraestructura comercial como de uso público”, resaltan.
El predio.
El predio seleccionado para la localización del Parque Agroalimentario de la Ciudad de Paraná se encuentra en un lugar estratégico, de fácil acceso. “Su proximidad con el túnel subfluvial Uranga – Sylvestre Begnis y las rutas nacionales 12, 127, 18 y 11 posibilitan una rápida comunicación con los diferentes puntos de la provincia y el resto del país, tanto para el ingreso de mercaderías como para la distribución posterior. En este contexto, la calle Gobernador Maya es el nexo más importante entre las rutas de llegada y salida al predio, debiéndose hacer una obra de mejoramiento de suelo y asfaltado en la continuidad de calle Churruarín abarcando aproximadamente dos kilómetros hasta llegar al predio”, se lee en el proyecto.

El terreno linda con las vías del tren a una distancia de apenas 60 metros. Por este motivo, “se decide establecer una relación con dicha vía de comunicación considerándola tanto como lugar de llegada de trabajadores del mercado, como posible medio de abastecimiento de alimentos”, añade.
La conexión con la vía del tren, precisa la iniciativa, se realizará a través de una pasarela elevada que enmarcará el ingreso vehicular al predio y luego desciende con una rampa para generar el ingreso peatonal. Dicha pasarela continúa generando la cubierta de la barra administrativa, educativa de apoyo a la producción.
La fachada norte, en tanto, estará conformada por dicha barra y un sector de 25 metros de ancho por 470 metros de largo otorgado a horticultores para la generación de huertas a cielo abierto o bajo invernaderos. De este modo, la producción adquiere un significado primordial y se visibiliza la situación de la misma ante los ingresos de compradores, vendedores, proveedores y el público en general que utilice el parque público en eventos.
En la fachada oeste se dispondrán los depósitos bajo un talud cubierto por vegetación. Esta acción ocultará la playa de maniobras, ya que suele ser un lugar ruidoso, liberando la fachada este para el ingreso de luz del amanecer (predominante horario de trabajo del mercado) y para su franca relación con el parque.
Los sanitarios públicos se dispondrán fuera del mercado como apéndices que se desprenden de la edificación mayor dando la posibilidad de que sean utilizados tanto por la gente del mercado como la del parque público.
Topografía.
La topografía del terreno tiene una marcada pendiente que desciende hacia el arroyo Las Tunas. En el lado oeste, el terreno presenta un sector con menor diferencia de nivel y mayor distancia hacia el cauce principal del arroyo. Respondiendo a esta característica la decisión es implantar el mercado en la porción más elevada del terreno. Como resultado, el mercado adquirirá mejores visuales del paisaje, evitará costosos movimientos de suelo y liberará la margen del arroyo principal generando un parque público. Dicho parque hará las veces de superficie inundable en momentos de grandes crecidas, y mediante la colocación de vegetación específica se propone tratar el agua proveniente del arroyo con el objetivo de mejorar la calidad de la misma. “El parque se plantará con especies comestibles volviéndose un verdadero parque agrario (lúdico) dentro de un parque agrario (productivo)”, destaca el texto.
Distribución de los puestos.
En el proyecto se propone que el mercado tenga una estructura modular con el fin de permitir un crecimiento programado de manera proporcionada. Con este objetivo, la distribución de los diferentes tamaños de los puestos de venta mayorista, se distribuirá de manera proporcional e intercalada. El intercalamiento evitará la concentración de los grandes puestos en determinados sectores y de los pequeños en otros.

Los locales mayoristas serán de tres superficies diferentes: 4x15m, 6x15m y 8x15m. La diferencia dimensional obedece a la demanda heterogénea que enfrenta el mercado. Más allá de esta estructura, la modularidad de la estructura de soporte, permitirá que aquellos puestos que lo deseen puedan comprar varios locales y generar un local de mayores dimensiones, o, en el caso contrario, dividir los locales grandes de 8m en dos pequeños de 4 metros de ancho.
Dentro de cada local se dispondrá de un sector proclive de ser cerrado para utilizarse como cámara frigorífica, contará con su baño privado cumpliendo con los requerimientos de accesibilidad y un sector de caja u oficina.
En ambos frentes del local, los cerramientos se realizarán con cortinas metálicas de chapa microperforada posibilitando la plena apertura de los mismos.
Frente a los locales mayoristas se ubicarán las plazas de los horticultores locales. Estas plazas, de 4 metros de lado, se corresponderán con la modulación de fachada y permitirán el doble uso. Por un lado, tendrán frente a la circulación principal de venta del mercado, y, por otro lado, a través de cortinas metálicas, tendrán la posibilidad de abrirse hacia el parque público.
Tiempos.
El proyecto, como se señaló, fue presentado por Bahl y Macri –acompañados por el diputado Marcelo Casaretto– al ministro Kulfas, y ahora la cartera productiva nacional lo está analizando.
La expectativa en la Municipalidad es que el Gobierno nacional le dé el OK en el transcurso de este 2021, tras lo cual se llamará inmediatamente a licitación. El plazo de construcción de la primera etapa, estiman, insumirá alrededor de un año, por lo que la mudanza de El Charrúa se podría concretar en 2023.
