Son más de 30 locales. Algunos de ellos se mudaron a zonas más económicas. Jorge López advierte por un panorama inflacionario y recesivo que se extiende. Nahuel Amore
Son más de 30 locales. Algunos de ellos se mudaron a zonas más económicas. Jorge López, titular del Centro Comercial e Industrial de la capital entrerriana, advierte por un panorama inflacionario y recesivo que se extiende.
Nahuel Amore | Dos Florines
El proceso inflacionario que se recrudece y la sostenida caída del consumo golpean fuerte al comercio en la provincia, que se constituye en el segundo generador de mano de obra después del Estado. “A nivel local y provincial, es uno de los peores momentos por los que está pasando el sector”, alertó Jorge López, titular del Centro Comercial e Industrial de Paraná y de la Federación Económica de Entre Ríos (Feder).
El escenario es preocupante y las perspectivas tampoco son alentadoras. Según datos aportados a DOS FLORINES, en promedio el 5% de los locales céntricos de la capital provincial cerró sus puertas. De todos ellos, unos pocos pudieron mudarse y buscar otras alternativas en zonas de la ciudad donde los alquileres y la presión impositiva son más bajos, al menos para sostenerse por un tiempo más.
“Haciendo un cálculo sobre unos 600 comercios del microcentro, observamos que hay un número de entre 30 y 35 locales cerrados. Eso se debe a dos motivos: están los que cerraron definitivamente porque no da la ecuación para continuar trabajando; y otro es el caso de los que buscan un local más económico”, detalló López.
Costos y ventas
Consultado en relación a las causas, el empresario apuntó fundamentalmente al incremento de costos de toda la estructura de funcionamiento, que va desde el alquiler, los impuestos nacionales, provinciales y tasas municipales, el costo energético que volvió a aumentar, la suba de los insumos, entre otros. A esto, además, se suma otro factor clave: la baja de ventas. “Se ha parado el consumo, todos los servicios están incrementándose día a día. En un período de recesión, se hace todo más difícil. Se nota muchísimo”, sostuvo.
Al respecto, advirtió que si bien los datos con los que cuenta no son precisos por falta de información pública actualizada por parte del municipio, manifestó que “realmente recorriendo los negocios, todo el mundo refiere que hay una baja de ventas muy importante” y que “en agosto se ha notado más”.
Lo más grave aún para el sector comercial es que tampoco ven perspectivas de que la situación se revierta en el corto plazo, por lo que muchos piensan dos veces en seguir o no en el rubro si los números cierran en rojo. “Por información que tenemos, estos próximos meses hasta fin de año va a ser tan duro como el mes de agosto. Va a ser durísimo”, anticipó López.
Recesión
El titular del Centro Comercial puso sobre la mesa los números que advierten este panorama. De acuerdo a los estudios de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), en julio el sector sufrió una caída del 5,8% comparado con el mes anterior, hecho que se replica en Entre Ríos. Esta cifra, cuando termine el mes que corre, puede ser más elevada aún. “Pensamos que en agosto va a ser a priori, por lo que hemos escuchado, más alto todavía”, señaló.
Claramente, la mayoría de los comerciantes no imaginó que la recesión se extendiera por tanto tiempo. “No pensamos que las variables que supuestamente pertenecían a un plan económico que tenía el Gobierno iban a ser en algún momento descontroladas, como fue por ejemplo el dólar”, aseguró López, y agregó: “Nadie imaginó un dólar a los niveles que está en el mercado. Y en casi todos los productos hay un componente dolarizado que tiene su impacto”.
Sobre esto, amplió: “Eso tiró todas las variables, derrumbó todo. Sobre todo, acompañó a una gran recesión, teniendo en cuenta que para sostener el dólar, el Gobierno utiliza las Lebac y las tasas de interés. Esto es gravísimo para el sector, porque no se puede acceder al crédito. Con una Lebac a los niveles que está, en realidad no hay mucha voluntad para el consumo sino más bien para ir al banco y poner la plata en un plazo fijo”.
Desde esta perspectiva, López advierte por una política de Estado que se sumergió en la “estanflación”. “El bajar el consumo y enfriar la economía, se ha utilizado muchas veces como herramienta para bajar la inflación. Pero esto no ha sucedido acá: hay inflación más recesión, lo cual es bastante peligroso”, expresó.
Pedidos a Nación
Ante este panorama, López señaló un punto clave que le pidieron al ministro de Producción, Danta Sica, para morigerar el impacto recesivo de la economía. “Hay una palanca financiera que es la tarjeta de crédito con Ahora 12 que ayuda mucho. Nosotros a nivel nacional hemos pedido desde CAME que se sostenga y que sea toda la semana, no solamente de jueves a domingo”, indicó.
Asimismo, dijo que también solicitaron “una baja de las tasas de interés para el sector pyme, también que a través de los encajes se permita a los bancos orientar créditos hacia las pymes, que se considere una baja tributaria y que se insista en el control de la mercadería ilegal que entra por frontera, como forma de paliar la situación”.
Consultado por las expectativas de que esto se cumpla, analizó: “Siempre hemos tenido respuestas. Esperamos que por lo menos se atiendan nuestros pedidos y cada una de las cuestiones. Si no es exactamente lo que pedimos, que sean medidas alternativas pero que vayan con el mismo objetivo, que tengamos un alivio para seguir funcionando”.
En este sentido, López reflexionó sobre la importancia que adquiere el sector para las familias paranaenses y la necesidad de que haya políticas concretas. “Las pymes son las que más rápidamente salen de una situación como esta; por su flexibilidad y naturaleza, están más dispuestas a reflotar la economía”, resaltó.
