Cambió de Axion a Shell en Paraná: a casi dos meses, ya mejoró ventas

19/03/2019

Alejandro Di Palma revela a DOS FLORINES por qué se pasó de bandera en la estación de avenida Laurencena. Nahuel Amore

En medio de la caída del consumo de combustibles por la recesión, la baja rentabilidad y problemas con los directivos de la firma Axion, Alejandro Di Palma tomó una decisión: se pasó a Shell en la estación de servicios que tiene en avenida Laurencena y Simón Bolívar de Paraná. En diálogo con DOS FLORINES, reveló algunos pormenores y destacó que en casi dos meses meses ya mejoró sus ventas. Ahora, apuesta a afianzar la relación comercial y sostener la tendencia, a pesar de la crisis del sector.

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Se trata de la estación ubicada estratégicamente en la avenida que conduce a los paranaenses y visitantes hacia la Costanera. Para sorpresa de muchos que pasan por allí, desde el 1° de febrero pasado cambió de color. Ya no es el fucsia estridente el que llama la atención, sino el amarillo y naranja de una marca mundial harta conocida, en la que más automovilistas confían por su calidad y a la que Di Palma le cierran mejor los números.

“Hoy por hoy, si bien las estadísticas son muy básicas por el poco tiempo, estamos vendiendo más con Shell que con Axion. Tenemos más ventas y una pequeña diferencia en lo que es la rentabilidad. Esto, sin perjuicio de que es el inicio de una relación comercial que nos permite un reset de todo y encausar la relación en términos más amenos, que no la teníamos”, expresó.

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Opciones

El empresario contó que parte de los problemas internos desencadenaron su salida de la ex Esso. “Participaba de una mesa de operadores de Axion y la verdad que estaba muy cruzado con esa gente. Teníamos muchos reclamos para hacerle, no sólo nuestros sino de otros operadores. Eso nos puso en una situación no ideal para continuar con la relación”, sintetizó.

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Además, consultado si le significaba una menor rentabilidad, fue contundente: “Totalmente. Te saca margen de ganancia”. Tomada la decisión de cambiar, la primera pregunta fue a cuál pasarse. “Nosotros tuvimos la posibilidad de tener oferta tanto de YPF como de Shell. No teníamos dudas de que podíamos vender más con YPF, pero tendríamos que haber hecho una reingeniería de la estación de servicio”, planteó.

A la hora de analizar las opciones, respecto de la petrolera nacional, puso en dudas la calidad del vínculo con el cliente. “Si prestás atención a las YPF, es una marca que pone muy poco énfasis en la atención, y nosotros tenemos un montón de personal. La verdad que no nos parece que sea un momento para hacer una reducción de personal para que tenga lógica el cambio de bandera”, aseguró.

Porcentajes

Sumado al aumento del volumen de ventas está la mejor ecuación. “El margen bruto depende de la petrolera y de los tipos de combustibles. Normalmente en los Premium, las rentas son mayores y andan en el orden del 12,5%. Después, en gasoil y nafta súper andan cerca del 10,5%. A eso tenés que descontar Ingresos Brutos y la tasa municipal, además de otro volumen importante de IVA”, explicó.

“¿Esos porcentajes eran sensiblemente menores en Axion”, consultó este cronista. A lo cual, el empresario reconoció que “en la otra petrolera eran algo menores y estaban sujetos al cumplimiento de programas comerciales; ese era uno de los primeros problemas que se le planteó a la petrolera”. En esta línea, aclaró que “todos quieren pagarte en cumplimiento de determinadas metas comerciales”, pero en el caso de la anterior firma le “generó muchas rispideces”. “Hubo mucha gente que calificaba mal y le bajaban la rentabilidad, lo cual dejaba los números en rojo”, acotó.

Finalmente, sin pelos en la lengua, fiel a su estilo directo, Di Palma criticó: “Hay un destrato hacia la red comercial, en particular de la gente de Axion”. De igual manera, también apuntó a que esta situación se da en un contexto difícil. “En general, todas las petroleras, la mayor parte de las estaciones, en términos numéricos, están casi de rodillas”, graficó.

Sector en crisis

El estacionero señaló que la crisis del rubro sacude a muchas empresas de la provincia, no sólo por la baja de consumo sino por la pérdida de rentabilidad. “Está todo el mundo quebrado. A esto se llega a partir de una política, sostenida desde hace mucho tiempo, que está permitiendo que las petroleras saqueen el sector: en una parte a los usuarios y en otra gran medida a las estaciones”, cuestionó.

En este sentido, advirtió por la desaparición de las estaciones de servicio en diferentes puntos del país, Entre Ríos incluida y sobre todo en pequeñas localidades. “Si vas a Villaguay o Basavilbaso no tenés muchas alternativas; incluso Diamante tenés una sola estación. Y hablamos de Entre Ríos, que estamos al lado de la Capital del país”, ejemplificó.

En este escenario, se quejó de las sugerencias del Gobierno nacional de tener que readaptarse para poder sostenerse –lo que los obliga a ampliar servicios por fuera de las naftas–. “Hay una intención manifiesta de proponerle al estacionero que cambie de rumbo, que sea un kiosquero o un tipo que cobre los impuestos porque al banco no le interesa”, indicó, y remató: “Cada vez el universo de posibilidades es menor; con esta lógica, hay gente que sobra”.

EL DATO

42 empleados tiene Alejandro Di Palma entre sus dos estaciones de servicio: avenida Laurencena (esquina Simón Bolívar) y avenida Ramírez (esquina Sarobe). Esta última también está en proceso de cambio de bandera, a la espera de que haya una mejor propuesta comercial.

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