Boglione vaticina caída del precio de leche al productor en el corto plazo

28/05/2020

El titular de La Sibila considera que se viene el pico de la producción y no levantan los mercados internos y externos en tiempos de pandemia. Dos Florines.

El escenario de los mercados internos y externos para la industria láctea se plantea muy complejo y a la baja, con las particularidades propias de cada país generando un gran stock de leche en polvo de parte de las industrias, con los precios también bajando.

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En este indeseable contexto, el empresario lácteo rosarino Federico Boglione -titular de la compañía que cuenta con una usina en la ciudad de Nogoyá- aseguró hoy que la coyuntura en camino de lograr en dos meses el pico de producción, “necesariamente habrá una baja en el precio que se paga al productor”, sin otra opción. 

El empresario, que también es tambero, disertó en la edición número 11 de los seminarios virtuales denominados Comité de Crisis, que organiza Agroeducación.com, de la Federación Argentina de la Industria Molinera, y describió precisa y extendidamente el momento de la lechería mundial en el marco de la pandemia y cómo ésta afecta a la cadena argentina.

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“Habrá una baja del precio al productor, y esto lo digo como productor porque el costo nuestro está en 14 pesos, y el tambero está cobrando 18,5 pesos, y es un buen número. Pero el precio va a ir para abajo, y no queda otra, porque la exportación no va a tirar, y lo que tire será el sobrante, y lo que tire estará a precios muy baratos”, argumentó el industrial.

Lo dijo en un marco donde también ve muchos problemas para la industria que no se verá favorecida, al igual que los tambos que sufrirán fuerte los primeros 90 días esta devaluación, con la perspectiva de recuperación con el tiempo.

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Boglione fue contundente con la realidad mundial de la lechería y la sintetizó en una frase inconmovible: “En el sector se va a ver más oferta que demanda”.

El titular de La Sibila describió que la demanda se frenó y la oferta sigue creciendo con el escenario que en septiembre se viene el pico de la producción de leche en el país.

Así, enumeró tres factores clave para este momento mundial. a) El primero es China, que sintió el impacto por el tema del Coronavirus- En este país -graficó Boglione- el consumo de lácteos no se produce en la vivienda, sino en bares y restaurantes en una particularidad cultural. Como los bares y restaurants están cerrados, el consumo de lácteos cayó estrepitosamente. “Si bien con los chinos nunca se sabe, nosotros creemos que tenían mucho stock que están terminando de consumirlo y en cualquier momento van a empezar a comprar en el mercado. Por ahora salieron a hacer algunas compras en Nueva Zelanda, pero no se ve ese impulso”.b) Por otro lado, Estados Unidos que llegó a tirar 25 millones de litros por día, que es el equivalente a lo que produce la Argentina por día. Ellos tiran porque la industria no estaba preparada para el retail, para el supermercado. Hay mucha industria en los EE.UU. preparada para los supermercados, para los Mc Donald´s, para los hoteles porque venden en packs de 20 kilos la crema, la leche, la manteca, y al estar cerrados no supieron dónde guardar todos sus productos y frenaron las compras a los tamberos que tuvieron que tirarla leche. Después le pidieron al productor que secara las vacas anticipadamente, que el productor directamente no produzca; y c) lo que está sucediendo en la Argentina.

En este punto, el industrial cree que este escenario le va a pegar a la Argentina un poco más adelante en el tiempo. “El consumo aquí sigue fuerte y la razón que vemos es que la gente al estar en su casa, al no poder ir a un restaurant, al no poder comprar ropa, no tiene manera de gastar el dinero y el que tiene la suerte de estar con un sueldo tiene como para comprar alimentos. Esto hace que el consumo todavía se mantenga. Cuando esto se empiece a liberar y haya más posibilidad de salir y gastar la nafta en el auto, o la vianda en la oficina, va a disminuir ese excedente de plata que había en la familia y entonces nos puede llegar a repercutir”, vaticinó el empresario lácteo.

Precios.

Con este plafón, el panorama no parece promisorio. Boglione precisa que si bien al tambero le bajó el precio internacional del maíz, y eso es bueno porque el precio del alimento es importante en el costo final, va a ser difícil sostener el precio en 18,5 pesos con semejante stock de leche en polvo que habrá en el mundo y en el país.  “Si estás en 18, 50 pesos el litro y el precio de producción está en 14, y te bajo un peso para dar señal que el mercado va a ir cayendo, como tambero, para no bajar la facturación voy a producir más, porque igual sigo ganando 3 pesos, entonces no se cual será el verdadero equilibrio que tendremos ahí”, explicó.

En el recorrido descriptivo en los últimos meses, haciendo foco en el tiempo de pandemia, explicó que el valor internacional de la leche es otra variable que complica a la producción local.

La leche en febrero cotizó a 3300 dólares la tonelada, y hoy está en 2700 dólares y “hay que pedir por favor que nos compren”. Uno de los pocos países que está comprando es Argelia, que es el gran comprador del mundo. Brasil desapareció del mercado -uno de los grandes compradores de leche de Argentina- porque con la devaluación le sale más barato comprarle a los productores. “Hoy, para los brasileros, poder fabricar un litro de leche en polvo estaría 2300 dólares, cuando nosotros estamos pidiendo 2700”, reseñó.

Además, complementó, que la caída del mercado interno no deja otra salida que la exportación, que hoy no está comprando. “La exportación está con precios malos, y tenemos retenciones del 9%, cosa que antes no teníamos y encima nos sacaron el 3 % de reintegro que se bajaron al 0,77 %, y esto es como que tuviéramos una retención del 11,25 %.  Con esta retención y una diferenciación entre leche en polvo que es del 9 % y de los quesos del 5 % se nos pone muy duro lo que se nos viene para toda la cadena en general”, sintetizó.

Quesos.

Al responder una consulta del moderador, Boglione también planteó un panorama críptico para el mercado de los quesos.

Lo hizo de este modo, muy illustrativo: “La leche en polvo -que tiene dos años de vencimiento y es lo que uno puede stockear- hoy tiene precios muy bajos. En Estados Unidos, Europa y em el mundo entero, además, se frenaron los quesos y todos empezaron a hacer leche en polvo, y hoy hay exceso de leche en polvo. Como dije, en breve tendremos el pico estacional de producción y habrá más leche en polvo. La fábrica de dulce de leche están vendiendo muy bien para los supermercados y caseros, pero se cayó la venta para la industria, porque al no haber colegios y clubes la venta de alfajores se cayó estrepitosamente. Entonces cuando uno empieza a mirar los muzzareleros y advierte que las pizzerías en las grandes ciudades están cerradas, mucho peor. Hoy los quesos están caros y la gente no tiene tanta plata y se va a los quesos baratos que son el cremoso, que es el que se está vendiendo”, describió el industrial.

En este marco aseguro que al principio se vendían los quesos más caros, pero con el correr de las semanas la gente fue eligiendo los más baratos y el yogurt de segundas marcas.  “En nuestro caso vendíamos cajitas de 800 gramos y hoy estamos vendiendo más cajitas de 400 gramos a pesar que la relación favorece al paquete más grande. Pero eso significa que está habiendo menos plata y la gente compra la más barata”. Precisó.

Para finalizar, Boglione explicó que, aunque todos lo saben, que a diferencia de otras industrias la leche se obtiene cada 12 horas por que no es posible dejar de ordeñar la vaca, y eso condiciona flujos y stocks. “Nosotros no podemos dejar de comprarle y tenemos más y más leche, porque un productor que abandonaste no lo tenés más con vos. Es todo un gran problema el stock cuando no hay  mercados”, concluyó.

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