La divisa cerró a $ 20,05, en medio de un clima financiero internacional calmo. Economistas vaticinan que cotizará entre $ 21,50 y $ 22 a fin de año.
Luego de varios días de alta volatilidad, esta semana finalizó con el dólar en $ 20,05 para la venta, es decir, unos 31 centavos por debajo de cómo había arrancado el miércoles, luego del feriado.
Los especialistas estiman que la divisa va a fluctuar, sin grandes turbulencias, en torno a su valor actual, al menos durante el primer trimestre.
“Salvo que el Banco Central (BCRA) decida bajar la tasa o que haya un problema climático con la cosecha, no vemos grandes cambios en términos nominales”, adelantó Gabriel Caamaño Gómez, de la Consultora Ledesma.
“Incluso, hay posibilidades de que cuando entren los dólares de los granos el tipo de cambio ceda un poco más”.
Durante la última semana, el Banco Central tomó la decisión de sostener las tasas de interés en 27,25%, con la intención de que no haya una mayor corrida hacia el dólar y una consecuente presión inflacionaria.
La medida fue celebrada por gran parte de los economistas de la City, que consideraron prudente, frente a las expectativas inflacionarias, detener la baja de tasas que se había propuesto la entidad monetaria para este año.
Al respecto, Lorenzo Sigaut, de la consultora Ecolatina, afirmó a Perfil: “El dólar se viene apreciando en Estados Unidos por el pleno empleo y las presiones inflacionarias, pero el gobierno argentino, de alguna manera, dijo por ahora más de veinte no”.
Entre otros motivos, Sigaut consideró que este freno permite dar mayor previsibilidad de cara a las negociaciones paritarias.
Devaluación.
En términos de competitividad, Sigaut analizó que la devaluación del 13%, que se produjo entre diciembre y enero, con nuevos picos en febrero, aportó mayor tranquilidad a los sectores productivos, pero señaló que las subas de precios que se esperan “le comerá algunos puntos” a la depreciación.
“No sé si el dólar le va a ganar a la inflación, creo que el dólar se movió primero y ahora se van a mover los precios”, afirmó Caamaño Gómez. “Uno no le puede pedir a la política monetaria que se encargue de asegurar la competitividad, mientras no tenga un equilibrio macro”, agregó.
Por otra parte, el economista prevé que el dólar finalice el año en torno a $21,50 y sin una apreciación significativa frente al aumento de precios de la economía argentina.
En las próximas semanas, los sectores agroexportadores comenzarán el período de liquidación de divisas. Es por ello que, a menos que haya movimientos bruscos a nivel internacional, el período que va desde marzo hasta junio suele ser de estabilidad cambiaria o, incluso, de apreciación del peso en relación a la moneda estadounidense, destacó el diario Perfil