Fuerte impacto del Covid en la industria santafesina en el segundo trimestre
06/08/2020
Un informe de la Unión Industrial de Santa Fe muestra, sector por sector, el impacto de los tres meses más duros de la cuarentena. Dos Florines
Un relevamiento realizado por la Unión Industrial de Santa Fe (UISF) exhibe el nivel de estrés y deterioro que generó en la industria santafesina los efectos de la pandemia, especialmente en los últimos tres meses de la cuarentena. Según el trabajo, la producción industrial en la región centro y norte de la Provincia de Santa Fe registró en el segundo trimestre de 2020 una pronunciada caída de -22,4% interanual, revelando con intensidad los efectos de la pandemia covid-19.

A continuación los principales indicadores relevados:
-Tras dos años de importantes retrocesos de actividad fabril (-3,9% en 2018 y -4,5% en 2019), en el primer semestre de 2020 la producción de manufacturas volvió a caer -13,8% en relación al mismo período del año anterior. Luego de nueve trimestres consecutivos de crisis el nivel actual de actividad de la industria regional se ubica -30% por debajo respecto del año 2015.

-Tras la paulatina rehabilitación de actividades, y en el actual contexto de distanciamiento social, en la primera quincena de julio de 2020 el 45% de las industrias consultadas manifestó encontrarse aun parcialmente operativa.
– Impactada plenamente por el combate de la pandemia, la utilización de la capacidad instalada mostró en el segundo trimestre de 2020 los valores más acotados de la serie histórica, alcanzando un registro mínimo de 43,3%. El indicador resultó afectado por el cese de varias actividades durante el mes de abril y la paulatina reapertura en mayo y junio. La industria metalúrgica, autopartista, bienes de capital, y caucho y plástico fueron las de mayor capacidad ociosa.

-En el segundo trimestre de 2020 una porción mayoritaria de las empresas (69%) manifestó haber enfrentado una disminución del su producción. Esta amplia franja de industrias revela la generalización sectorial del panorama recesivo. Únicamente ciertos rubros de la industria alimenticia y química surgen como las menos impactadas por el combate al coronavirus.
-En línea con el resto de los indicadores, la evaluación de la cartera actual de pedidos de producción es consideraba “baja” por dos terceras partes de las industrias de la región. En el otro extremo, solo un acotado grupo que alcanza al 16% del total empresas considera adecuada su nivel de demanda de productos.
-El nivel de empleo entre las industrias relevadas evidenció un deterioro de -2,1% en relación al mismo trimestre del año anterior. Se manifiesta así un especial esfuerzo empresarial por el sostenimiento de los puestos de trabajo en un contexto de severas restricciones y fuerte caída de la demanda y la producción.
-En el segundo trimestre de 2020 se manifestó una profunda caída de los niveles de facturación de las empresas industriales. En términos nominales crecieron solamente +13,2% interanual, reflejando la fuerte caída real de los niveles de producción y comercialización. La notoria caída de ingresos por ventas agudizó las dificultades financieras de las empresas. En el segundo trimestre de 2020 el 45% de las industrias enfrentó mayores problemas en su cadena de pagos que derivaron en crecientes índices de endeudamiento. En tal sentido, el 61% de las fábricas accedió a la línea de crédito al 24% impulsada por el Gobierno Nacional.
– El precio medio del principal producto fabricado registró un alza de +45,6% interanual, mientras que el costo unitario de producción evolucionó a un ritmo de +49,7% interanual. Los mayores precios de las materias primas e insumos industriales fueron señalados como los principales impulsores de los costos.
El 46% de las industrias de la región avizora mayores niveles de producción para el segundo semestre de 2020, doblegando al segmento con pronósticos negativos. Este mejor resultado esperado se condice con la extraordinaria situación atravesada especialmente durante el segundo semestre. Sin embargo, solo el 17% de las empresas considera potencialmente factible incrementar sus actuales niveles de empleo de recursos humanos. Mayores inversiones son previstas por el 39% de las consultadas.
– El Programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción (ATP) alcanzó una importante inserción entre las industrias de la región centro-norte de Santa Fe. El 76% de las consultadas accedió al mencionado programa, representando un paliativo tras el derrumbe de la actividad y la facturación.
– Más del 80% de las empresas considera que tras una eventual finalización del distanciamiento social, preventivo y obligatorio, la reactivación de su actividad podría darse hasta en 90 días. En tal posible escenario, entre las dificultades avizoradas por las industrias se destacan: escasa demanda de sus productos, elevada presión impositiva, menor disponibilidad de financiamiento y los mayores costos de producción.
– En el primer semestre de 2020 el nivel de industrialización de soja en Santa Fe presentó una baja de -3,8% interanual, totalizando un volumen procesado de 16,8 millones de toneladas. Por su parte, la elaboración de aceite de soja que en seis meses alcanzó a 3,3 millones de toneladas, representando una merma de -2,5% frente al mismo período de 2019. El nivel actual de actividad sectorial es el menor de los últimos cinco años. Tanto en valor como en volumen, las exportaciones con origen Santa Fe de ambos principales productos del complejo soja mostraron en el primer cuatrimestre de 2020 importantes bajas.
– Al finalizar el primer semestre de 2020 la producción nacional de carne bovina superó levemente las 1,5 millones de toneladas equivalente res con hueso, un volumen +4,2% superior en relación al mismo período del año anterior. En seis meses la faena de más de 6,7 millones de cabezas representó un incremento de +4,3% en cotejo al primer semestre de 2019. Entre enero y mayo de 2020 el volumen de las exportaciones argentinas de carne bovina trepó a 328 mil toneladas eq. res con hueso, representando una expansión de +18,5% frente al mismo lapso del año anterior. Sin embargo, el consumo aparente por persona registró en el cotejo acumulado al mes de mayo de 2020 una nueva disminución de -3,3% interanual, al retroceder a 49,4 kilogramos.
– La industria avícola argentina procesó en el período enero-mayo de 2020 algo más de 317 millones de cabezas, representando una mejora de +2,9% en relación a igual período del año pasado. En cinco meses la producción nacional de carne aviar creció +4%, mientras que el consumo anual por habitante (43,9 kilogramos) se expandió +1,7%. El volumen exportado se incrementó +9% en la medición acumulada al mes de mayo. En Santa Fe la actividad sectorial muestra resultados desfavorables, la faena cayó -14% interanual en mayo, y acumula una baja de -9% en los primeros cinco meses de 2019.
– La faena porcina trepó a prácticamente 2,8 millones de cabezas, mostrando en cinco meses de 2020 una baja de -0,75% frente al año anterior. La producción argentina de carne porcina enfrentó en cinco meses una baja de -2,6%, al totalizar 253 mil toneladas equivalente res con hueso. El consumo anual de carne porcina por persona (13,7 kilogramos) registró en el cotejo acumulado enero-mayo de 2020 una disminución de -7,2% en relación a igual período del año pasado. El volumen exportado, en términos de toneladas peso producto, se expandió en cinco meses +40% en relación a 2019.
– La industria láctea santafesina muestra desde febrero de 2020 y hasta la actualidad una coyuntura marcada por una cierta recuperación de su nivel de actividad. En mayo la recepción de materia prima presentó una mejora de +14,8% interanual, acumulando en cinco meses un incremento de +7,1% en relación a igual período del año anterior. Entre los meses de enero y mayo de 2020 el arribo de leche a las principales plantas lácteas en Santa Fe trepó a 867 millones de litros. En el primer cuatrimestre de 2020 las exportaciones santafesinas de productos lácteos mejoraron +17,7% en valor, y +47% en el caso de leche entera en polvo, siempre en relación al mismo período de 2019. Argelia, Brasil, Paraguay y Chile son los principales cuatro mercado de destino, destacándose en 2020 la nación africana por el fuerte incremento de las compras de productos santafesinos.
– La industria metalúrgica en Santa Fe enfrentó en mayo de 2020 una nueva y aguda caída de -30% en la medición interanual. En cinco meses la producción metalmecánica retrocedió -24% en relación al mismo período de 2019. Los reiterados menores niveles de consumo e inversión, y el bajo nivel de actividad en laindustria automotriz, construcción, petróleo, gas, y energía, fundamentan la prolongada y profunda crisis sectorial, acentuada desde marzo tras el avance de pandemia Covid-19.
– La utilización de la capacidad instalada en la industria metalúrgica registró en los meses de marzo, abril y mayo de 2020 tres registros mínimos históricos de 30,4%, 20,1% y 31,7% respectivamente. Este indicador retrocede en forma reiterada en los últimos veinticinco. Los retrocesos de actividad resultaron generalizados, destacándose los siguientes resultados sectoriales: fundición (-63%); productos metálicos para uso estructural (-60%); otros productos de metal y servicios de trabajo (-41%); maquinaria de uso general (-50%); maquinaria agropecuaria (+32%); otra maquinaria de uso especial (-36%); aparatos de uso doméstico (-58%); equipos y aparatos eléctricos (-54%); autopartes (-75%); Carrocerías-remolques (-13%) y motocicletas (-73%).
– El nivel total de empleo privado en el Gran Santa Fe muestra desde abril de 2019 y hasta el presente un paulatino retroceso interanual. En mayo de 2020, entre empresas de 5 y más trabajadores, se observó una nueva caída de -3,3% en relación al mismo mes del año anterior. En ese período las compañías de hasta 200 trabajadores quienes enfrentan las mayores pérdidas de empleo.
– En el primer trimestre de 2020 la caída de empleo resulto generalizada. La actividad de la construcción fue la más perjudicada al retroceder -18,5% interanual. La rama transporte, almacenaje y comunicaciones observó un descenso de -5,2%, la industria manufacturera -2,2%, y comercio, restaurant y hoteles se contrajo -1,2% interanual.
– La crisis causada por la pandemia impacta de forma directa en las decisiones empresarias de contratación de personal. Por caso, en abril y mayo las firmas con altas de personal mostraron valores mínimos históricos, representando solo el 2% del total. En mayo se encontraba en plena vigencia el aislamiento social preventivo y obligatorio declarado en el marco de la pandemia del Covid 19, ya se había autorizado la reapertura de algunas actividades además de las declaradas esenciales.