El Gobierno provincial se suma a la lucha contra las langostas
21/07/2020
La manga está en el departamento Federal, a 30 kilómetros de la ciudad cabecera. Está asentada en una zona de monte y los técnicos del Senasa definen por estas horas la estrategia sobre eventuales aplicaciones. Danilo Lima
La manga de langostas que ingresó el último domingo a Entre Ríos fue ubicada por técnicos del Senasa, anoche, en El Rincón de los Negros, un establecimiento agropecuario que se encuentra en una zona de monte, a 30 kilómetros de la ciudad de Federal.
Esta situación profundizó la preocupación de los productores del centro-norte entrerriano ante el riesgo de que las langostas –es el temor en el campo– se queden en la zona. “Esto es algo muy grave, el riesgo es altísimo”, advirtió Nicasio Tito, el vicepresidente de la Federación de Asociaciones Rurales de Entre Ríos (Farer), quien, además, consideró indispensable el trabajo conjunto entre el Senasa, la Provincia, los Municipios y las entidades de productores para combatir la plaga. “Hay que tomar medidas de inmediato, ahora, ya”, enfatizó el ruralista federalense.
Mientras, el secretario de Agricultura y Ganadería de Entre Ríos, Lucio Amavet, le dijo a DOS FLORINES que en el Gobierno se conformó “un espacio donde están representados, además de la provincia, el Senasa, el Colegio de Profesionales de la Agronomía de Entre Ríos (Copaer), los Municipios de Feliciano, La Paz y Federal porque “las estamos esperando (a las langostas) desde que estaban en Corrientes”.
El funcionario, asimismo, confirmó que técnicos del Senasa están trabajando en el lugar para determinar qué tipo de aplicaciones se puede realizar.
“Desde la provincia, en articulación con la Asociación de Cooperativas Argentinas y la Cámara de Aeroaplicadores, pusimos a disposición los productos y los aviones para el caso de que se pueda hacer una aplicación aérea. Caso contrario, en forma conjunta con los municipios y las entidades de productores, haremos aplicaciones terrestres”, informó Amavet. Todo dependerá de las decisiones que adopten los técnicos del Senasa.
Este cuadro de situación, obviamente, puede modificarse si cambian las condiciones climáticas: con viento norte la manga puede levantar vuelo y dirigirse hacia la zona de Chajarí y Concordia, pero si sopla viento sur y vuelve el frío intenso puede quedarse en el lugar.
Amavet, finalmente, remarcó que la presencia de las langostas no significa ningún riesgo para la salud humana, al tiempo que recordó que en su paso por otras provincias las langostas no atacaron cultivos agrícolas sino que se asentaron en montes nativos.