“Con las ventas actuales, no podemos pagar sueldos, impuestos, luz ni gas”

Así, Alejandro Di Palma advirtió por las imposibilidades de pactar un acuerdo de pagos por facturas vencidas de Enersa. Dos Florines

Alejandro Di Palma, titular de Estaciones de Servicio Laurencena en Paraná, viene advirtiendo desde el inicio de la cuarentena por las severas dificultades económicas y financieras que atraviesan las pequeñas y medianas empresas, a raíz de la paralización total o parcial de sus actividades. En ese marco, cuestionó los elevados costos tarifarios que deben asumir, lo cual obliga a los empresarios a definir prioridades.

A raíz de esta situación, Di Palma elevó una nota a Enersa, en la que planteó la imposibilidad de poder pagar la tarifa de luz que recibió en marzo, debido concretamente a que la brutal caída de ventas no generó los ingresos necesarios para cubrir la totalidad de la estructura de gastos. Abonar los salarios del personal fue, según remarcó, la prioridad.

Ante esto, la respuesta de la empresa de energía provincial llegó, con el recuerdo de que existe la adhesión de Entre Ríos a la normativa nacional que prohíbe el corte del servicio por mora. Pero además, realizaron una propuesta de “concretar un acuerdo de pago a efectos de cancelar las facturas que se encuentren pendientes de pago, considerando los lineamientos comerciales de esta Distribuidora cómo como vuestras posibilidades de pago”.

Incertidumbre

“Nos agarra en un momento de incertidumbre”, expresó Di Palma ante la respuesta de Enersa, y cuestionó la dificultad de poder concertar un acuerdo de pagos ante la falta de previsiones respecto de los ingresos futuros. “Con las ventas actuales, no solamente no podemos pagar sueldos, tampoco pagar impuestos, la luz ni el gas. No podemos pagar nada porque simplemente no nos alcanza para pagar los sueldos”, alertó, y se preguntó: “¿Cómo hacemos para mantener el negocio abierto?”

“A quienes no les podemos pedir nada, porque no ayudaron, son las petroleras. Les estaciones duales están desde ese punto de vista con una imposibilidad de negociar nada, porque al no haber intervenido el Estado de alguna manera, tenés un problema, porque no cambió nada la política comercial. Ahí nos están abusando”, manifestó el empresario.

En esta línea, lamentó: “Si no sé cómo van a evolucionar las ventas, no sé siquiera con certeza cuándo va a cambiar la cuarentena. Parece una ventura estúpida sentarme a negociar un plan de pagos. El plan que ya negociamos es de 12 cuotas con tres meses de gracia y 24% de interés con los bancos para pagar sueldos de este mes que pasó. A fin de mes vamos a tener otro problema más”.

De esta manera, anticipó que el impacto en el sector seguirá hacia adelante. “Además, aunque esto evolucione como lo acordado por el Presidente, tenemos todo el mes de abril que va a ser un desastre y todas esas facturas las vamos a recibir a principios de mayo. Parece estúpido sentarse a pactar un método de pago para la cancelación de la factura”, concluyó.