Análisis sobre la compra venta de humo

03/12/2019

Por Alejandro Di Palma*

Siendo que estamos terminando un periodo que sin dudas se caracterizó por “la venta de humo”, una matriz de comportamiento que definía la publicación sistemática de nimiedades en las redes sociales como si se tratara de eventos notables, hitos históricos… al terminar este periodo y luego de un análisis sobre el balance de las gestiones, podemos asegurar que simplemente se trataba de nada, era en definitiva algo tan etéreo como “el humo”.

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Fuimos bombardeados por esa nada y pretendimos que esa nada fuera algo tan sustancial, serio y moderno que rápidamente nos sacaría del estado de decadencia en el que estamos para acercarnos al “éxito al cual estamos condenados”, un destino ineludible.

En esa lógica y aun después de la dolarización de la energía, compramos el humo de las energía renovables, sin analizar el altísimo costo diferencial entre estas y las energías convencionales y preferimos no ver el que en ese camino, las familias debieron alterar su reloj biológico yéndose a dormir antes para evitar el costo de mantener una bombita encendida, tampoco se analizó la dependencia de este tipo de generación de los necesarios insumos externos que impactarían sobre una balanza comercial que siempre fue el talón de Aquiles de la economía.

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Energías renovables que, si bien son sustentables para el medio ambiente, durante este periodo de la historia NO han sido sustentables socialmente y sobre el concepto de “amigables”, podríamos afirmar sin temor a equivocarnos que han sido “altamente amigables” para los grupos empresarios cercanos al actual gobierno, quienes se vieron enriquecidos por esta industria apalancada (ref: Pampa Energía – Marcelo Mindlin).

No costaría nada analizar lo que paso en Uruguay con la energía eólica, la cual luego de desarrollada solo se utiliza para atender el servicio en horarios pico o sea que la supuesta sustitución de energías de impacto negativo NO se verifica, casualmente por problemas económicos.

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Hace unos días y en el crepúsculo de una gestión que sin dudas NO va a resultar muy mencionada en la historia productiva de la Provincia, se organizó otro “ágape”, quizás una referencia a “la ultima cena”, un evento sobre el biogás y la pretensión de algunos funcionarios de articularlo junto con el “Plan Energético a 10 años” que seguramente resultaran abofeteados por la realidad de la latitud, una realidad que no obedece a la lógica de las redes sociales y que sentencia que la generación de gas en procesos anaeróbicos responde a una potencia de la temperatura ambiente.

Mientras estos funcionarios, algunos de los cuales ya son exfuncionarios celebran con sanguichitos de miga en esos eventos organizados con dineros públicos, una modernidad, un desarrollo y una prosperidad de ocurrencia dudosa, no podemos dejar de señalar que en nuestra provincia hay dos plantas de biodiésel paradas porque simplemente la política de definición de precios del gobierno Nacional los condena a un quebranto gigantesco y estos funcionarios Provinciales que celebran, no han gestionado nada para evitar este impacto.

Así mismo el pasado sábado 30/11 el servicio de energía eléctrica que abastece a toda la producción entre Paraná y Viale estuvo sin servicio desde las 2 am hasta la 11:30 Hs, un quebranto de servicio que es altamente frecuente y sobre el cual el que suscribe la nota ha realizado muchas cuestiones al Ente Regulador, quien pareciera no haber advertido el problema cerrando sistemáticamente el caso sin ninguna otra cuestión.

Estos dos ejemplos, lamentablemente, forman parte de un conjunto demasiado grande de eventos que desnudan una realidad que nada tiene que ver con las pretendidas en publicidades y redes sociales, podemos asegurar que el concepto de posverdad cotiza alto en el mercado de valores de la comunicación política. Pero como dijo un viejo sabio “la única verdad es la realidad” y en ese sentido bien podríamos asegurar parafraseando a Macron que en términos productivos “el Gobierno Provincial sufre de parálisis cerebral”.

Esperemos que este nuevo periodo que está por comenzar nos depare algo nuevo, solo creo que es interesante advertir que para que una operación comercial se materialice hay que juntar las voluntades de dos partes, o sea que para que alguien “venda humo” tiene que haber otra parte dispuesta a “comprar humo”.

*Empresario de Estaciones de Servicio Laurencena

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