Cítricos dulces, forestación y arroz, entre las producciones más afectadas por los costos
29/04/2019
Así lo señala el Semáforo de Economías Regionales que elabora Coninagro. También están complicados el vino, las peras y manzanas y la papa. Dos Florines
El desempeño dispar de los precios relativos incidió de forma heterogénea en las producciones de las economías regionales analizadas por la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro), especialmente de aquellas con mayor destino al consumo interno. Eso se desprende del análisis de las actividades con información a marzo de este año.

Por el lado del componente que analiza el negocio a nivel predio, de las 19 economías relevadas por Coninagro, “la suba de los costos acumulada de los últimos doce meses fue superior al aumento de los precios en nueve de ellas”, detalla la entidad. Esto produjo que continuara “el deterioro de los resultados” y se postergaran decisiones, incluso en las producciones que en marzo mejoraron en parte sus precios al productor.
Respecto del componente de mercado, en el comercio exterior “se mantiene la tendencia a la reducción de las importaciones para casi todas las producciones”, agrega Coninagro. Sin embargo, comienzan a aparecer “decrecimientos interanuales en el consumo interno de varias producciones, como en carne bovina, algunos granos que se procesan industrialmente, lácteos, carne porcina y vino, repercutiendo negativamente en dichas actividades”. Además, por el lado de las ventas al exterior, “la mitad de las actividades mejoraron su desempeño exportador, confirmando que el tipo de cambio no es la única variable que interviene en la competitividad”.

Del componente productivo, añade la entidad, también se observan heterogeneidades marcadas: se proyectan mejoras en la presente campaña tanto en volumen como en superficie en siete producciones, pero en cuatro producciones se ven dificultades mayores a la campaña pasada. De estas últimas, en tres de los casos las menores proyecciones no estarían tan ligadas al clima, sino a la falta de rentabilidad (vino y mosto, peras y manzanas y arroz).
Finalmente, Coninagro destaca que las modificaciones en el desempeño de cada economía regional “no se encuentra aislado de la realidad macroeconómica actual, de altas tasas de interés, presión fiscal y volatilidad cambiaria”.

Rojo, amarillo y verde.
El informe de Coninagro, asimismo, precisa que en marzo creció la cantidad de actividades en gamas de verde respecto de febrero. Se sumaron nuevas al rojo profundo, aquellas afectadas en los tres niveles: producción, mercado y la micro del negocio. Más de la mitad de las actividades están en rojo y en amarillo.
Los siete rojos: vino, cítricos dulces, papa, peras y manzanas, forestación y arroz. “Su estado actual se explica mayormente por tener costos más altos que los precios, destinar gran parte de su producción al mercado interno, teniendo su consumo estancado y exportaciones que no repuntan”, explica Coninagro.
El caso de las peras y manzanas, junto al vino, combina las peores circunstancias: mercado sobre fertado, bajos precios de exportación, costos exponenciales, de financiamiento, siendo que no son actividades que pueden armarse y desarmarse en un año, sino que los ciclos son de cuatro años en adelante. Las peras y manzanas llevan ya cinco meses en rojo, mientras que la vitivinicultura mantiene su 14° mes consecutivo en crisis.
Los cinco amarillos: algodón, bovinos, hortalizas, miel y ovinos. Se destaca la actividad bovina de carne que ingresa en esta categoría por los menores volúmenes de producción.
Los siete verdes: aves, granos, leche, mandioca, porcinos y yerba mate. En esta categoría se destacan algunos repuntes en los precios, la expansión de exportaciones y las mejores perspectivas productivas respecto a campañas pasadas. La producción de leche se ubica en este color por mostrar una evolución positiva; muchos de sus eslabones, sin embargo, no logran recuperar años de haber estado en rojo, con tres meses en verde.