Argentina ante una nueva coyuntura: oportunidad o crisis

Por Horacio Grubert – CPN – Especialista en mercados financieros

La nueva calificación del mercado argentino (Stand alone) de este jueves 24 de junio por la tarde plantea dos interrogantes: oportunidad o crisis.

Oportunidad:

Nuestro gobernantes, ante este nuevo escenario financiero, en línea con la administración Biden la cual condiciona el apoyo ante el FMI a la creación de actividad privada, puede a) entender el mensaje del sistema financiero,  el cual nos deja solos – standalone- y lejos de los mercados financieros; b) empezar a hacer las reformas estructurales (impositivas, laborales, sindicales, estado) necesarias para generar y estimular una economía moderna, productiva e inclusiva donde el PBI vincule la mano de obra y no sea un mero indicador de actividad en relación a la población; c)

insertar a la Argentina en el mundo de la industria y la tecnología, con bienes y servicios, compitiendo por preferencia de consumidores extranjeros y locales, donde se elaboren bienes y servicios de bajo, mediano y alto valor agregado con mano de obra y tecnología argentina que genere recursos genuinos dejando de lado la eterna dependencia del dólar e inversiones extranjeras; d) acompañar y no ser un obstáculo de inversores y emprendedores nacionales, en fin donde el Estado proteja a sus habitantes, empresas y empresarios, sin necesidad asistencialismos y/o subsidios, solo con reglas claras justas y estables

Crisis.

No leer este mensaje por parte de nuestros gobernantes significaría no aprender de los errores, cerrarse totalmente y empezar intervenir cada vez más en la actividad económica privada y en la vida de las personas, conducir un camino cada vez más peligroso de escases, pobreza y distribución del Estado de la escases creciente,  hundir cada vez mas argentinos en la pobreza y provocar el éxodo de no sólo el capital sino de los recursos humanos que tengo costo al pueblo argentino formar en la universidades públicas.

Ignorar que no se puede vivir de prestado, significa ignorar que el trabajo no solo dignifica al hombre también dignifica a las naciones, ya que como a los hombres, el trabajo del pueblo dignifica e independiza las naciones.