Análisis de Néstor Roulet (CRA)
A comienzos de año el USDA (Departamento de Agricultura de Estados Unidos) estimaba que Argentina podría crecer un 4,4 % anual en su producción de leche. Si bien es muy difícil obtener datos concretos respecto de la producción de leche en el país, podemos afirmar – teniendo en cuenta la información publicada por el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación y la Cámara de industrias Lácteas (CIL) – que el crecimiento duplicaría esa estimación, ubicándose en alrededor del 10 %.
Esto indicaría que en los ocho primeros meses del año el aumento en la producción – cotejado con lo ocurrido en el 2010 – fue de 800 millones de litros.
Teniendo en cuenta que ese volumen de leche solo puede ser canalizado hacia el exterior, ya que los niveles de consumo doméstico se encuentran al máximo de su capacidad, esta mayor producción es – en un 100 % – saldo exportable. Comparando lo exportado en los ocho primeros meses del año 2010 con lo exportado en igual período del año 2011 (Cuadro 1), resulta que la mayor exportación no estaría cubriendo el saldo exportable, quedando un remanente que se aproxima a los 200 millones de litros en el mercado interno.
Comparación entre exportaciones lácteas durante los ocho primeros meses de 2010 y 2011.
Exportado en los 8 primeros meses del 2010 equivalente en litros de leche 1.069.706.250
Exportado en los 8 primeros meses del 2011 equivalente en litro de leche 1.671.212.290
Diferencia (En litros de leche) 601.506.040
Aumento de producción en los 8 primeros meses de 2011 (En litros de leche) 800.000.000
Sobreoferta de leche en el mercado interno (En litros) 198.493.960
Excedentes.
¿Cuál es el inconveniente de volcar al mercado interno casi 200 millones de litros de leche en los 8 primeros meses del año?
Ante una sobreoferta de leche en el mercado interno, las más perjudicadas son aquellas PYMES que no tienen posibilidades de acceder a mercados externos y deben colocar sus productos en un mercado interno sobreofertado mediante la disminución de los respectivos valores, sin poder competir con empresas de buena inserción comercial.
Este menor precio de venta de sus productos conlleva dos alternativas:
1) Bajar sus costos, siendo el de la materia prima el más fácil y directo, lo que genera márgenes negativos al productor al tener menores ingresos y aumentos considerables en sus costos.
2) Recibir menos leche – algunas Pymes cerrando sus puertas – dejando al productor en una situación de debilidad ante otros compradores. Hoy directamente no hay empresa que quiera recibir más leche.
Si al análisis lo hacemos por período anual, observaremos que con un aumento del 10 % en la producción de leche, el saldo exportable es de 3.060 millones de litros. Teniendo en cuenta lo exportado hasta el mes de agosto (Cuadro 2) significa que en el último cuatrimestre del año se debería exportar un 84 % de lo exportado en los 8 primeros meses del año para evitar la sobreoferta en el mercado interno y desencadenar un círculo vicioso de reducción en el precio de la leche en tambo.
Exportaciones en el último cuatrimestre para compensar la mayor producción de leche.
Producción de leche año 2011 (En litros) 11.220.000.000
Consumo mercado interno (En litros) (*) 8.159.486.000
Saldo exportable (En litros) 3.060.514.000
Exportado en los 8 primeros meses (Equivalente litros de leche) 1.671.212.290
Saldo a exportar en el último cuatrimestre 2011 (Equivalente litros de leche) 1.389.301.710
Relación 8 primeros meses/últimos cuatro meses (%) 84
Opciones.
¿Qué posibilidades hay de exportar los 1.389 millones de litros de leche en 4 meses?
La alternativa más fácil y rápida sería exportar estos 1.389 millones de litros como leche en polvo (LP) por tratarse de un commodity para el que habitualmente hay mercados y cuyo precio actual lo permitiría.
En uno de los informes publicados, el INALE – Instituto Nacional de la Leche – de Uruguay destacó que el precio promedio de la tonelada de leche en polvo entera exportada por el vecino país para el mes de septiembre fue de US$ 4.468.-, mostrando un aumento del 10,3% respecto del precio para el mes anterior; estos valores permiten pagar por encima de 0,41 U$S/litro de leche en tambo.
El problema en Argentina está en la limitación de secado de leche por falta de inversión en el sector. La falta de inversión está asociada – entre otras cuestiones – al esquema de exportaciones implementado por el Gobierno Nacional – entrega de ROEL – que le quita previsibilidad al negocio.
Tomando en cuenta una capacidad de secado de 10,1 mml/día (millones de litro por día) sería factible secar 1.100 millones de litros de leche durante el último cuatrimestre, de los cuales 150 millones tendrían como destino el consumo interno y los 950 millones restantes la exportación.
Si a los 1.389 millones de litros de leche se le restan los 950 millones de litros con posibilidades de ser exportados como leche en polvo, se obtiene un saldo de 439 millones de litros que deben ser exportados – más de 100 millones de litros por mes – como otros productos lácteos, alternativa totalmente inviable.
Las últimas preguntas a las que deberemos encontrar respuesta son: ¿Qué pasará con esta sobreoferta de leche en el mercado interno?. ¿Por qué el país no se preparó durante estos últimos años para afrontar un probable escenario de crecimiento de la producción primaria?
Fuente: Punto Biz
