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Nuseed presentó un nuevo cultivo: brassica carinata

Es una oleaginosa de invierno a partir de la cual se produce un aceite no comestible que se utiliza para producir biocombustible. Dos Florines

En la campaña 2019, Nuseed Argentina dio el primer paso del Programa de Biocombustibles basados en una agricultura sustentable que la compañía propone a nivel global, comenzando a comercializar brassica carinata –o carinata, simplemente–, un cultivo no GMO (no modificado genéticamente) que se utiliza para producir biocombustible de segunda generación derivado de aceites no comestibles.

Carinata es un cultivo oleaginoso desarrollado para la producción sostenible de biocombustibles que, además de producir aceites no comestibles, produce harina proteica para la alimentación animal.

Este cultivo de invierno presenta una opción interesante para los productores agropecuarios generando un valor agregado a la producción y permitiendo ingresos adicionales bajo los aspectos de la sustentabilidad.

Más allá del rinde es una filosofía global de Nuseed que impulsa a la compañía a desarrollar valor agregado a sus cultivos. Como parte de esta filosofía, se promueve la producción de biocombustibles de segunda generación derivados de aceites no comestibles, fomentando la idea de una agricultura sustentable a largo plazo y generando un horizonte nuevo e innovador que representa un creciente negocio en energía más limpia.

La Carinata le ofrece al productor agropecuario la oportunidad de incluir un cultivo de invierno de alto valor agregado sin afectar los cultivos principales y de integrar una alternativa de tipo oleaginosa a la rotación generando una diversificación rentable en el sistema de producción.

Durante el Congreso de Aapresid que se desarrolló en Rosario, Nuseed informó a los productores acerca de este nuevo cultivo en el país y sobre la propuesta de valor que lleva aparejada, a la par de los beneficios en la sustentabilidad que la Carinata aporta a la rotación.

Daniel Introna, líder del Proyecto Carinata, en este sentido, explicó la propuesta de Nuseed “es un negocio distinto, no sólo desde el punto de vista económico-financiero, sino también desde lo agronómico, al incorporar una alternativa productiva en un momento clave del año”.

Carinata es una oleaginosa invernal, similar a la colza, que produce un aceite no comestible para el consumo humano y destinado a la industria aeronáutica. Es decir, no hay competencia respecto del maíz, por ejemplo, que se destina a la alimentación.

Introna, además, informó que ya hay desarrollos en nuestra provincia, y también en la zona de Videla, en Santa Fe, y San Pedro, en Buenos Aires, donde se encuentra el único puerto que exporta esta mercadería, dado que, al no ser GMO, debe certificarse. En la Argentina hay más de 2.000 hectáreas sembradas y en Uruguay cerca de 8.000.

“Se usa el 10 % de corte, pero del B10 se puede pasar al B100, donde un avión podrá volar con el 100 % de biocombustible sin tener que hacer modificaciones en sus motores”, añadió Introna.

Qantas, la aerolínea australiana, realizó el año pasado la primera experiencia: voló desde Estados Unidos a Australia y se midió una reducción del 70 % en la emisión de gases.

En materia de números, Introna estimó que el costo de la siembra directa por hectárea, dependiendo del planteo, es entre 280 y 300 dólares, con márgenes brutos de 300 dólares. Es un margen muy competitivo respecto de otros cultivos”.

La ventana de siembra, según la zona, se ubica entre el 10 de abril y últimos días de mayo, con floración a fines de agosto/septiembre y madurez fisiológica y cosecha a mediados de noviembre.

Carinata posee buena tolerancia al desgrane y temperaturas bajas, y un muy buen perfil sanitario. En una rotación calza muy bien en lotes que vienen de una soja de segunda, y, si se siembra temprano, puede servir como cultivo de cobertura. Al cosecharse temprano, además, se puede hacer maíz, sorgo o soja como cultivo de segunda. UN rinde promedio se ubica entre 20 y 22 quintales por hectárea.

Introna, finalmente, remarcó que Nuseed cuenta con “un equipo técnico que se acerca al productor para explicarle no sólo el modelo de negocio sino también el manejo del cultivo”.

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