Estudio privado compara la evolución de precios entre el súper asiático, una cadena nacional y una despensa de barrio. Nahuel Amore
Lo que muchos pensaban porque lo comprobaban en la práctica, fue confirmado por un estudio privado. Según el Índice Coca Cola en la capital entrerriana, cualquier supermercado chino es más barato que otros negocios. La diferencia por litro puede alcanzar casi cinco pesos. Así lo asegura el Centro de Análisis Económicos y Sociales de la Federación Económica de Entre Ríos (Feder), de acuerdo al informe publicado en agosto al que accedió DOS FLORINES.
Para elaborar el estudio, se toma el precio de la bebida en diversos puntos de venta de la ciudad de Paraná, considerando tres tipos de negocios: el almacén de barrio, un supermercado de propietarios conocidos coloquialmente como “chinos” y, tercero, uno de cadena nacional. A partir de este relevamiento, se compara mes a mes desde 2013 cuál ha sido la evolución, no sólo para observar la inflación, sino la evolución en distintos lugares de venta al público.
La evolución de las cifras en las tres bocas de expendio se percibe clara y fácilmente. Salvo meses puntuales, las relaciones comparativas se mantienen a lo largo del tiempo, como asimismo el sostenido incremento del valor al que se vende la bebida. En lo que va de 2019, la boca de expendio más cara entre los relevados es el supermercado de cadena nacional y el supermercado chino es el más económico.
Comparación
Según explican, la disparidad de precios se da entre distintos modelos de negocios. En síntesis, no es igual la estructura de costos y el volumen de ventas en una despensa de barrio instalada en los suburbios de la ciudad con clientes estrictamente de ese entorno y de dueños locales; que un supermercado denominado comúnmente “chino” por la nacionalidad de sus propietarios y con una “forma particular de desarrollar el negocio”; o que un supermercado de cadena nacional, en que el local en nuestra ciudad es otra sucursal dentro de muchas otras. Esto es clave para el valor final.
El bien es considerado relevante por su consumo masivo y porque su precio está definido por un solo proveedor, el que también fija el precio de venta al público “sugerido”. Partiendo de esta base, la última actualización del Índice señala que en agosto el litro de Coca Cola vale 40 pesos promedio en un supermercado chino, mientras que en una despensa de barrio cuesta 42 pesos y en un supermercado de cadena nacional se consigue a 44,80. Prácticamente, cinco pesos de diferencia entre extremos.
Más allá de estos precios nominales, si uno compara la inflación acumulada del producto, se da una situación particular: la menor suba se dio en la despensa, del 10,5% de enero a agosto -quizá contenida por las dificultades de venta en los barrios por la pérdida de poder adquisitivo de muchas familias-. En tanto, en el supermercado chino subió 11% en los primeros ocho meses del año y un 17,8% en las cadenas nacionales.
De todas maneras, la evolución en los últimos cuatro años –desde diciembre de 2015– resume por qué el comercio de origen asiático es más barato. Mientras la Coca Cola subió 262% su valor en la cadena nacional, lo hizo en el orden del 209% en la despensa de barrio y del 186% en el súper chino.
