Entidades públicas y privadas vinculadas al sector agropecuario decidieron avanzar en acciones concretas tendientes a crear ese nucleamiento que difunda las BPA. Danilo Lima
Mientras todos esperan ansiosos la firma, por parte del gobernador Gustavo Bordet, del nuevo decreto sobre aplicaciones de productos fitosanitarios, representantes de diversas entidades relacionadas con el sector agropecuario decidieron dar el primer paso formal para la constitución de la denominada Mesa de Buenas Prácticas Agropecuarias (BPA). Se trata de la instancia previa a la conformación del Nodo Entre Ríos de BPA –similar al que ya existe en las provincias de Córdoba y Santa Fe– para determinar, sobre la base de consensos, las herramientas adecuadas para producir y procesar los productos agropecuarios, de modo que la siembra, cosecha y pos-cosecha de los cultivos cumplan con los requerimientos necesarios para una producción sana, segura y amigable con el ambiente.
La sede de la Bolsa de Cereales de Entre Ríos fue el escenario del encuentro en donde se debatió y acordó comenzar a transitar este camino, indispensable para que Entre Ríos logre una producción sustentable desde lo ambiental, lo económico y lo social.
El director nacional de Agricultura, Ignacio Garciarena; el secretario de Producción de Entre Ríos, Álvaro Gabás; y el coordinador nacional de Buenas Prácticas Agropecuarias, Juan Brihet, encabezaron el encuentro en donde se expusieron los lineamientos generales de las BPA y los pasos a seguir para la constitución del Nodo Entre Ríos. La reunión, además, y sobre todo, sirvió para escuchar las inquietudes de los representantes de las entidades.
De cara al futuro inmediato, la idea que logró consenso tras el debate es realizar la presentación formal de la Mesa de Buenas Prácticas Agropecuarias el 22 de agosto próximo, durante una jornada que se desarrollará en Gualeguay.
Consensos.
Garciarena, en primer lugar, remarcó la necesidad de que esta mesa se construya sobre la base de consensos surgidos entre las entidades participantes, y, después, buscar acuerdos con aquellos sectores que piensan distinto.
La Red de Buenas Prácticas Agropecuarias es el resultado de un proceso de diálogo interinstitucional entre las principales entidades públicas y privadas de la Argentina que desarrollan diversas actividades en relación a las BPA, destacó.
Los integrantes de la Red, subrayó Garciarena, entienden que las BPA constituyen un instrumento estratégico para atender adecuadamente los desafíos del crecimiento cuantitativo y cualitativo de la demanda nacional y mundial de los productos de la agroindustria, que implica la integración de la disponibilidad, la calidad e inocuidad y la sustentabilidad de la producción agroindustrial.
Brihet, por su parte, repasó las acciones llevadas adelante desde 2014, cuando arrancó la Red sobre la base de un trabajo de articulación público-privada. “Es muy difícil generar consensos”, admitió Brihet, pero destacó que aun así “hemos obtenido logros”.
En materia de agroquímicos, por ejemplo, Brihet destacó la elaboración de recomendaciones para legislar en los municipios sobre aplicaciones de productos fitosanitarios. También valoró la búsqueda de indicadores que sirvieron de base para la elaboración de guías para cultivos extensivos e intensivos.
La Red de BPA, de donde surgió la necesidad de conformar nodos –el primero de los cuales se constituyó en Córdoba–, tiene tres objetivos centrales, según explicó Brihet: implementar las BPA en el país, comunicar y unificar conceptos agropecuarios en la sociedad, y participar de espacios de discusión y decisión sociales y políticos.
La detección temprana de conflictos –a través de lo que se conoce como sistema de alarma–, la implementación concreta de las BPA y el fortalecimiento del compromiso institucional son, asimismo, objetivos de la Red. Medir las BPA, vincularse con los legisladores e interactuar con la demanda –los consumidores– también forman parte de las metas de la Red.
Brihet, finalmente, sostuvo que “no hay una receta común” para la constitución de las mesas provinciales; por el contrario, “esa receta debe ser necesariamente local”.
Gabás, a su turno, valoró la conformación de “este espacio plural, abierto y democrático”, destacó la experiencia de Entre Ríos en trabajos interinstitucionales, y comprometió el respaldo de la Secretaría de Producción para el logro de los objetivos planteados. “Este es el camino”, enfatizó el funcionario bordetista.
El dedo en la llaga.
Fue un dirigente gremial, sin embargo, el encargado de admitir las falencias del sector agropecuario cuando se debate públicamente el tema de las aplicaciones de fitosanitarios.
“Cuando la gente nos pregunta cómo afectan los agroquímicos a la salud no podemos dar respuestas”, reconoció a modo de autocrítica Alfredo Bel, uno de los referentes históricos de la Federación Agraria en Entre Ríos, tras lo cual le apuntó directamente al Ministerio de Salud de Entre Ríos, a cargo de Sonia Velázquez, por la falta de información sobre el tema. “No hay respuestas del Gobierno cuando aparecen estos planteos sobre la salud”, dijo Bel.
El dirigente federado, asimismo, señaló que “debemos ir a las universidades públicas y privadas de Entre Ríos para reivindicarlas” porque, argumentó, “acá viene cualquiera, de cualquier lado, y dice cualquier cosa (en contra de la producción agropecuaria) y no reaccionamos. Tenemos que pedirles a las universidades información y ayuda”.
Luego de cuestionar “el sesgo contrario a la producción” de las autoridades de Educación, Bel propuso invitar a las jornadas sobre BPA “a los que no están de acuerdo con nosotros” para debatir la problemática y para que conozcan cómo produce el campo entrerriano.
Presencias.
Además de las autoridades de la Secretaría de Agroindustria de la Nación y de funcionarios y técnicos de la Secretaría de Producción de la provincia, más los principales referentes de la Bolsa de Cereales de Entre Ríos, de la reunión participaron representantes de los grupos CREA, Aapresid (Regional Paraná), INTA (Centro Regional y Agencia Crespo), Municipio de Villa Urquiza, Cámara Arbitral de Cereales de Entre Ríos y la Mesa de Enlace (FAA, Farer, Fedeco y SRA).
También estuvieron representados el Centro de Acopiadores de Entre Ríos, la Federación del Citrus de Entre Ríos (Fecier) los colegios de ingenieros agrónomos (Copaer y Círculo de Victoria), La Agrícola Regional de Crespo, el Consejo Empresario de Entre Ríos, la Cámara de Productores Porcinos de Entre Ríos (Capper), Asociación de Cooperativas Argentinas (ACA), Cooperativas Agropecuarias Federadas de Entre Ríos (Cafer), Coninagro, Unión Industrial de Entre Ríos (UIER) y la Facultad de Ciencias Agropecuarias de la UNER.
